La polémica vuelve a la familia del presidente de Estados Unidos. Ivanka Trump, mejor conocida como la Primera Hija, ha sido centro de críticas desde que su padre asumió la Presidencia, debido a sus intentos de impulsar sus carrera política, pero desmarcarse de asuntos importantes, como la inmigración, separación de niños de sus padres, tiroteos, entre otros asuntos.
La revista Vanity Fair publicó un perfil de la hija del presidente Donald Trump, donde destaca las pocas habilidades que la empresaria tiene en la política, donde ha participado gracias a las influencias de su padre.
A pesar de no estar “calificada”, indica la publicación, Ivanka ha sido perfilada para ocupar posiciones importantes –que por fortuna no se concretaron, indica el análisis–, como ser embajadora de la ONU o dirigir el Banco Mundial.
La publicación destaca las investigaciones judiciales de las que la también exmodelo forma parte, como el utilizar la Fundación Trump para desviar recursos. La fotografía que la revista utiliza se volvió viral en redes sociales, a pesar de no ser reciente, ya que fue tomada en 2004, en su habitación de la residencia Mar-a-Lago. Ivanka luce sensual sobre la alfrombra, era la época en que todavía era modelo.
This Vanity Fair piece about Ivanka Trump reads like a parody of status-signalling wokeness. Ivanka’s chief sin is being white, wearing white, having a white dog and publishing a book with a white cover. The journalist, needless to say, is white. https://t.co/XD6xvsK0pY
— Toby Young (@toadmeister) August 9, 2019
Hay quienes criticaron la pieza, al considerar que se acusa injustamente a Ivanka de sus privilegios, como lo hizo el conocido bloguero inglés Toby Young, quien destaca que el artículo hace puntual precisión en los privilegios de Ivanka, pero cuestiona que su “pecado” sea ser blanca.
El artículo de Vanity Fair destaca algunos momentos fallidos de Ivanka, como el vídeo que se volvió viral por mostrarla en un intento de involucrarse en una conversación de alto nivel con líderes mundiales, como la primera ministra Theresa May y el presidente francés Emmanuel Macron.
También se señalan los intentos del presidente Trump de destacar los “logros” de su hija, como en febrero pasado, cuando afirmó que había ayudado a la creación de “millones de empleos”, una afirmación sobre la que The Washington Post otorgó tres de cada cuatro Pinocho por ser mentira.
