En el 2014, la casa de subastas francesa Articuliar se topó con un descubrimiento que dejo a medio mundo de la industria automotriz con la boca abierta.
Un tesoro escondido que sirve como prueba de que todavía hay muchos coches raros y antiguos merodeando por el continente europeo.
Se trata de un barn find, término que se le da a los auto olvidados o abandonados que son encontrados después de muchos años. Pero no cualquiera: uno que permaneció casi medio siglo sin ser tocado.
Todo comenzó cuando los expertos en antigüedades en la casa de subastas recibieron una llamada para inspeccionar una serie de autos en el oeste de Francia que venían con el terreno que un hombre había heredado. El terreno había pasado de generación en generación pero nadie lo utilizó.
“Al entrar a las puertas de esta propiedad, no teníamos idea de lo que encontraríamos”.
Eso dijo uno de los expertos a la publicación New Atlas, agregando:
“En el fondo de un campo, luego en una de las dependencias de la propiedad, un antiguo granero que se había convertido en un garaje improvisado”.
Según el relato de los especialistas, cada vez eran más los autos raros que iban encontrando.
Aunque no se explica con detalle los modelos de autos que se encontraron, la casa de subastas dijo que el número de autos alcanzó los 60 vehículos.
Entre ellos, hay modelos de las marcas Bugatti, Hispano-Suiza, Talbot-Lago, Panhard-Levassor, Maserati, Ferrari, Delahaye y Delage.
También, New Atlas explica que algunos de estos vehículos fueron fabricados por los mejores diseñadores de su periodo: Million & Guiet, Frua, Chapron and Saoutchik.
Y entre estos autos se encontraban al menos de tres Talbot Lago T26 diseñados por Saoutchik, un Grand Sport Aérodynamique muy raro y un Cabriolé Talbot Lago T26 que alguna vez fue propiedad del Rey Farouk.
