Guillermo Fariñas, grave al cumplir siete meses en huelga hambre

(Periodista Digital/ EFE).- Un colectivo de treinta opositores de diferentes organizaciones visitaron el pasado 26 de agosto al periodista independiente Guillermo Fariñas Hernández en el hospital Arnaldo Milían Castro de la ciudad de Santa Clara, Cuba, donde se encuentra ingresado en grave estado de salud.

Guillermo Fariñas Hernández mantiene desde hace casi siete meses una huelga de hambre para reclamar libre acceso a la Internet para todos los cubanos.
Idania Yanes Contreras, coordinadora nacional del Movimiento Femenino Marta Abreu (MFMA) dijo que Fariñas, director de la agencia de prensa independiente Cubanacán Press, «no gesticuló palabra alguna y sólo abrió los ojos por unos instantes, además, se le notó el rostro muy inflamado».

Según el especialista Mario Domínguez, Fariñas presenta una presión arterial muy baja, también posee un «estafilococo aureus» y padece de altas fiebres continuas.
Agregó Yanes Contreras que a la entrada del hospital dos miembros del Partido Comunista de Cuba (PCC) preguntaron al grupo de opositores que si estaban citados por las Brigadas de Respuesta Rápidas, lo que supuso una gran equivocación.

El estado de salud del disidente cubano Guillermo Fariñas, que mañana, jueves, cumplirá siete meses en huelga de hambre, se ha agravado en los últimos días, dijo hoy a Efe su madre, Alicia Hernández.

Fariñas, un psicólogo de 43 años, director de la agencia de prensa independiente Cubanacán Press, inició el pasado 31 de enero una huelga de hambre en demanda de que el gobierno de la isla le facilite el acceso a un servicio de internet en su domicilio.

«Está bastante grave porque desde la semana pasada está teniendo fiebre, ha tenido vómitos, dolor de cabeza y en las articulaciones, y tiene también problemas renales», explicó Hernández en una conversación telefónica desde su domicilio en la ciudad central de Santa Clara, a unos 300 kilómetros al este de La Habana.

Fariñas fue trasladado la semana anterior al «aislado 2», una habitación de la sala de terapia intensiva del hospital provincial «Arnaldo Milián Castro», donde puede recibir visitas, aunque separado de cristales los martes, jueves, sábados y domingos, dijo.

«Que dios ponga su mano. Estamos esperando cualquier cosa porque está muy mal», manifestó la madre, de 71 años, y enfermera jubilada.

Indicó que al opositor cubano, que ha realizado 20 huelgas de hambre desde 1995, le están aplicando en este momento un tratamiento intravenoso con potentes antibióticos para combatir dos bacterias detectadas en su organismo.

Además, indicó que la semana pasada le tuvieron que hacer una transfusión de sangre porque le había bajado la hemoglobina.

«Está decaído, le cuesta trabajo incorporarse debido a la fiebre, pero tiene buen ánimo y está consciente, orientado y lúcido. El me dijo que ya no esperaba nada, que sabe no le van a poner internet», comentó.

Hernández dice que los médicos que atienden a su hijo «están haciendo todo el esfuerzo posible, están permanente encima de él. El lunes le hicieron un ecocardiograma y tiene una afectación en la válvula mitral del corazón y está conectado a un monitor para el registro cardiaco», agregó.

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