(Periodista Latino/ EFE).- El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo hoy a una radio de Bogotá que el actual embajador colombiano ante la OEA, Camilo Ospina, «es un loco» o «estaba borracho» por decir que su país enriquecerá uranio junto a Irán.
Chávez dijo al enviado de la emisora «La FM» a la Cumbre de los No Alineados (NOAL) en La Habana que:
«Salen unas declaraciones de Bogotá, que dificultan un poco (la relación de los dos países). Ha dicho el Embajador (de Colombia) en la OEA una cosa que es horrible. Yo no sé si estaba borracho. ¿Será que él toma ron o es loco?».
Chávez se refería al actual embajador de Colombia ante la Organización de Estados Americanos (OEA) y ex ministro de Defensa, quien señaló en un foro en una universidad bogotana, el pasado 9 de agosto, la posibilidad de que Irán pudiese enriquecer uranio en Venezuela.
«Venezuela no tiene cómo enriquecer uranio, pero Irán sí. Si eso llegara a pasar, tenemos un problema de verdad. Pero bueno, esa es una hipótesis que se ve muy lejana».
Esta semana el sucesor de Ospina en la cartera de Defensa, Juan Manuel Santos, salió al paso de las declaraciones de Ospina y dijo en Bogotá que fueron «una mera hipótesis».
Chávez señaló que no sabe si hay uranio en su país y dijo: «es una locura que un embajador de Colombia en la OEA diga que Venezuela e Irán tenemos una fábrica de bicicletas y que debajo de esa fábrica tenemos (uranio). ¡El tipo tuvo que estar borracho!»
Señaló que él «ya lo hubiera destituido» y añadió que es:
«Muy preocupante (…) uno tiende la mano a Colombia, pero de allá para acá se encarga gente de lanzar piedra de manera injusta, sin sentido y sin ningún tipo de razón».
De todos modos, remarcó,
«Pase lo que pase, amamos a Colombia y yo quiero ir a Bogotá».
En la misma entrevista, por otra parte, se refirió a la salud del presidente de Cuba, Fidel Castro.
Está «muy bien» y «esta mañana estuvimos conversando dos horas. Lo vi muy recuperado. Cada vez que lo veo está mejor. Está ya de pie, caminando en una habitación, muy bien para su edad, y para la gravedad de la enfermedad que tuvo», dijo.
También consideró como «un tema muy difícil» la aspiración de Venezuela de entrar en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas como miembro no permanente.
Se trata, subrayó, «de una batalla mundial contra el Imperio» y agregó que:
«Estados Unidos ha enviado cartas y delegados, ha tratado de chantajear y ha amenazado de distintas maneras a países para tratar de evitar el ingreso de Venezuela al Consejo de Seguridad».
«Estamos dando la batalla y afortunadamente tenemos muchos amigos en el mundo».
