(Periodista Latino / BBC MUndo).- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, despidió al jefe de su campaña electoral, Ricardo Berzoini, a menos de dos semanas de las elecciones presidenciales y en medio de un escándalo de corrupción.
Berzoini, quien además es presidente del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), será reemplazado por el vice presidente de la organización, Marco Aurelio García, también asesor de la Presidencia de la República para Asuntos Internacionales.
La Corte Federal Electoral investiga a Berzoini, el presidente Lula y otros altos dirigentes del PT en relación a la supuesta compra de documentos para acusar de hechos ilícitos a candidatos opositores.
No obstante, las últimas encuestas continúan señalando a Lula como el favorito para lograr la reelección en una primera vuelta de los comicios del 1 de octubre.
El escándalo estalló después de que Freud Godoy, asesor de la Secretaría Particular del presidente brasileño, renunció a su cargo tras ser denunciado ante la Policía Federal bajo acusaciones de haber ordenado la compra de documentos para acusar de hechos ilícitos a candidatos opositores.
Documentos falsos
El abogado Gedimar Pereira Passos informó a la policía que un miembro del PT le habría pagado US$814.000 para que mandara a redactar el falso documento.
El abogado Gedimar Pereira Passos informó a la policía que un miembro del PT le habría pagado US$814.000 para que mandara a redactar el falso documento.
La policía informó que Pereira Passos dijo que su interlocutor, identificado como «Froude o Freud«, le habría pedido que vinculase al candidato a gobernador de Sao Paulo del opositor Partido de la Social Democracia, José Serra, con una mafia acusada de fraudes en la compra de ambulancias para varios municipios.
Decenas de parlamentarios y dos ex ministros de Salud del actual gobierno están bajo investigación en relación con el caso.
Corresponsales en Brasil informaron que el escándalo le ha dado a la oposición la primera oportunidad de contrarrestar la amplia ventaja que tiene el presidente Lula y lograr que los comicios sean decididos en una segunda vuelta electoral.
