(PL/Agencias).- El equipo de rescate ha conseguido recuperar a las 9:35 horas el cuerpo de Diego Armando Estacio, el segundo ecuatoriano de 19 años muerto en el atentado cometido por ETA el 30 de diciembre en el aparcamiento de la T4 del aeropuerto madrileño de Barajas.
El levantamiento del cadáver fue ordenado por el juez de guardia de la Audiencia Nacional, Ismael Moreno, tras 31 horas de trabajos.
El joven murió por «insuficiencia respiratoria», según el avance preliminar de la autopsia que le han realizado en el Instituto Anatómico Forense.
Ahora se realizan los tramites correspondientes para la «inmediata repatriación» de la víctima a Ecuador, aunque el director de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, Joan Mesquida, no pudo concretar la hora exacta del traslado desde el aeropuerto de Torrejón de Ardoz.
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, presenció en el aparcamiento de la T4 de Barajas las últimas labores de rescate. También estaban allí el vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, y el director general de Emergencias Madrid, Alfonso del Álamo.
Una cámara introducida por los bomberos captó la madrugada del viernes imágenes de un brazo y la parte interior de un antebrazo, lo que confirmó que el cuerpo de la víctima estaba dentro del coche, localizado poco después de las 21.00 horas del jueves en la planta primera del módulo D. La familia ha expresado su deseo de trasladar los restos mortales a Ecuador cuando sea posible.
En el aparcamiento de la T4 continúan trabajando una quincena de bomberos junto a la Policía Científica y con ayuda de operarios de maquinaria de la empresa Dragados para la retirada de los escombros.
Un bulldozer, dos palas excavadoras y una unidad de bomberos trabajan sin descanso en esta difícil labor, incluso «a mano», algo imprescindible para liberar el cuerpo sin vida de Estacio, atrapado dentro del Clio color blanco en el que se encontraba durmiendo en el momento de la explosión.
La labor se ha hecho especialmente minuciosa debido al importante peligro de derrumbe que presenta la zona, por lo que el trabajo se centra en sacar escombro y retener los laterales para que no se vengan abajo las toneladas de forjado acumulado.
Intensa búsqueda
La búsqueda de Estacio se centró el pasado jueves en un lugar diferente después de que la novia del desaparecido rectificara su «apreciación inicial» respecto al lugar donde creía que habían aparcado el coche, según explicó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
La pareja del desaparecido reconoció este jueves por la mañana la plaza 616 de la primera planta del módulo D del aparcamiento, mientras que hasta ese momento se había centrado la búsqueda en la segunda planta del edificio, que quedó destruido tras la explosión de la potente furgoneta-bomba colocada por ETA.
Estacio había acudido hacia las 8.00 del sábado, día del atentado, al aeropuerto junto a su novia, Verónica Arequipa, para recoger a la madre de uno de ellos. Aparcaron su coche, un Renault Clio blanco del año 1995, en el módulo de aparcamiento D de la Terminal 4 y decidió quedarse en el coche echando una cabezada mientras la joven acudía a la terminal.
Este miércoles, los servicios de Emergencias recuperaron el cadáver del otro desaparecido, Carlos Alonso Palate, bajo los escombros del aparcamiento de la T4. Los primeros datos de la autopsia determinan que murió por parada cardiorrespiratoria por compresión. Su cuerpo ha sido ya repatriado a Ecuador.
Palate ha sido la primera víctima mortal de la banda terrorista en tres años y siete meses; desde que el 30 de mayo de 2003 matara con un coche bomba a dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía en la localidad navarra de Sangüesa.
Su cadáver llegó de madrugada a Quito en un avión de la Fuerza Aérea española. Acompañaban a su ataúd decenas de rosas rojas.
