(PL/Agencias).- Diez turistas murieron en la madrugada de ayer en el incendio de un hostal en Punta Arenas, en la Patagonia chilena. La tragedia coincidió con otra que se registraba en el centro de Valparaíso: una explosión en la red subterránea de gas provocó el derrumbe de tres edificios y dejó dos muertos y al menos 20 desaparecidos, además de desatar un tremendo incendio que dañó parte del casco histórico de esta ciudad, declarado patrimonio cultural de la humanidad por la Unesco.
La explosión en la red de gas domiciliario, que ocurrió pasadas las ocho de la mañana cerca del puerto de Valparaíso, situado 110 kilómetros al oeste de Santiago, se saldó además con 10 heridos -tres de ellos graves- y 40 familias damnificadas al cierre de esta edición. Sin embargo, al menos 20 personas permanecían desaparecidas bajo los escombros, por lo que los bomberos temen que el número de víctimas mortales aumente.
La explosión provocó el derrumbe de dos edificios antiguos, de dos pisos de altura, del casco histórico de la ciudad, donde vivían hacinadas unas 20 familias de bajos ingresos. «Es un espectáculo dantesco», dijo el alcalde de Valparaíso, Aldo Cornejo, según informa Efe, después de observar por varios minutos más de dos manzanas destruidas por una explosión y posterior incendio que acabó con una docena de casas, todas antiguas.
Nueve horas después, unos 200 bomberos seguían combatiendo las llamas. La policía acordonó el lugar y los socorristas con el apoyo de perros entrenados buscaban sobrevivientes en medio de las ruinas. «Hay gente bajo de los escombros», afirmó el ministro del Interior, Belisario Velasco, quien viajó a esta ciudad, al igual que la presidenta, Michelle Bachelet, que suspendió sus vacaciones.
La fuerza de la explosión derribó postes, rompió los vidrios en las cercanías y los servicios se interrumpieron. En el sector acordonado por la policía persistían las fugas de gas en la tarde y rebrotaron las llamas en dos edificios.
Tragedia en Punta Arenas
Por otra parte, en la madrugada del sábado, 10 turistas de diferentes nacionalidades, entre ellos cinco mujeres y dos niños de ocho y seis años, murieron por inhalación de monóxido de carbono debido a un incendio en el hostal Blue House, donde alojaban en el centro de Punta Arenas, a 3.000 kilómetros al sur de la capital.
El incendio comenzó en la madrugada, al parecer en el primer piso, en la zona de la cocina y el comedor, según la policía. El hostal no contaba con salidas de emergencia ni detectores de humo. En el momento en que comenzaron las llamas dormían en el lugar 16 personas.
Cuatro de las víctimas son argentinas (un matrimonio, con la esposa embarazada de siete meses, y sus dos hijos). Otras cuatro son alemanes y dos más, holandeses. Los otros seis huéspedes lograron huir, entre ellos un cabo de carabineros y su esposa, que rompieron una ventana del segundo piso y saltaron a la calle. Todos resultaron con contusiones y afectados por la inhalación de gas.
