(PD / EFE).- Las telenovelas no son exclusivas de Colombia. La repercusión internacional de las de producción mexicana lleva a algunos estados de este país a competir para acoger sus rodajes y poder gozar así de una excepcional campaña de publicidad tanto en México como en el exterior.
Las telenovelas son un gran escaparate del país de origen para el resto del mundo. Su repercusión internacional, tanto en España como en otros países latinoamericanos, las convierten en el mejor expositor para exportar los valores naturales, sociales y turísticos del país productor. Tanto que sus autoridades acuden a eventos que concentran a directores y productores, a quienes tientan con los atractivos de sus estados y con la promesa de apoyo económico.
Es el caso de México, donde las cadenas tienen sus platós en la capital, pero «hay historias que necesitan presentar lugares bonitos, tanto a México como al mundo», lo que hace necesario salir, ha explicado el productor asociado de Televisa, Bosco Primo de Rivera. «Salir fuera es un gasto, pero si te encierras no es lo mismo que salir a la provincia, donde hay otro aire, otro cielo», afirmó el productor.
El apoyo estatal se produce desde hace bastantes años, pero las menciones promocionales de las regiones nunca pueden alterar el guión, sino que deben adaptarse a él. Los estados de Veracruz, Puebla, Jalisco o Guerrero son algunos de los que más apoyo ofrecen actualmente. En la decisión de salir a rodar a provincia pesa bastante la distancia respecto a la capital.
El estado de Guerrero tiene convenios de colaboración con Televisa para la producción de programas, como el evento musical ‘Guerrero Brilla’, así que la comunicación es más estrecha. En cambio, Jalisco aunque está bastante más alejado, su condición de cuna de los charros y del tequila hizo que la exitosa ‘Destilando amor’ se rodara allí en 2007.
También ha habido experiencias positivas con el apoyo gubernamental en el estado de Quintana Roo, en el Caribe mexicano, muy lejano a la capital pero dotado de exhuberantes playas. Uno que no tuvo tanta suerte fue Oaxaca, que en 2006 vivió un estallido social, por lo que perdió muchos visitantes.
El rodaje de la telenovela ‘Fuego en la sangre’, la apuesta de Televisa para el género esta temporada, se sitúa en el estado de Puebla, incentivada por el gobierno regional. «Para nosotros sería fabuloso que una telenovela hecha en Puebla fuera vendida a una televisión española, a una japonesa… la promoción no se puede pagar», dijo Juan José Bretón, secretario de Turismo de este estado.
«No se da dinero sino que se pagan hoteles, alimentos y traslados del equipo», explicó Bretón sobre el apoyo a la serie ‘Pasión de gavilanes’, que relata la venganza de los hermanos Reyes contra la familia Elizondo por la muerte de su hermana. Basada en el original colombiano ‘Las aguas mansas’, ha interesado ya a las televisiones españolas Antena 3 y Tele 5.
Las cadenas acuden a los mercados internacionales a vender sus telenovelas. La expansión internacional no se limita sólo a los mercados de habla hispana: el grupo de comunicación TV Azteca exportó su serie ‘La hija del jardinero’ (2003) a 80 países y ‘Amor en custodia’ (2005), a otros 50.
