Una avioneta se estrelló ayer en el aeropuerto de la ciudad boliviana de Cochabamba (centro) y su único tripulante salió sangrando, aunque por sus propios medios pudo marcharse en un taxi, informaron testigos del accidente a medios locales.
(EFE).-Poco antes de las 16.00 (20.00 GMT) el pequeño monomotor fue visto por testigos volando «demasiado bajo», en los alrededores de la pista antigua del Aeropuerto Jorge Wilstermann, donde acabó estrellado.
El piloto, un canadiense de nombre Eduardo Black, al parecer sin heridas de gravedad pero sangrando, fue visto salir, pasar por la terminal de pasajeros y marcharse en taxi, presumiblemente a un centro médico.
Según quienes presenciaron el accidente, las ruedas del aeroplano tocaron con unos cables y las vallas de una cancha que hay en los alrededores del aeródromo.
Fuentes oficiales dijeron a medios de Cochabamba que Black probaba la aeronave cuando sobrevino el accidente.
El aparato quedó casi en vertical, con el morro destrozado contra el asfalto de la pista alternativa a la que usan los aviones comerciales.