El jurado del juicio que se sigue en Estados Unidos al guerrillero colombiano Ricardo Palmera, alias «Simón Trinidad», por narcotráfico comenzó ayer a deliberar para alcanzar un veredicto sobre su culpabilidad o inocencia.
(EFE).-Fuentes judiciales dijeron a Efe que los doce miembros del jurado recibieron las instrucciones pertinentes del juez federal Royce Lamberth e iniciaron a continuación las deliberaciones.
La fiscalía acusa al guerrillero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) de haber conspirado para producir y distribuir «cinco kilogramos o más» de cocaína de manera «deliberada y a sabiendas» de que iba a ser introducida en Estados Unidos.
El jurado tendrá que llegar a un veredicto unánime, para lo que se puede tomar el tiempo que necesite y podrá comunicarse con el juez mediante notas y pedirle nuevas instrucciones o definiciones sobre el caso con el fin de poder avanzar en sus debates internos.
De hecho, a pocas horas de iniciar las deliberaciones, el jurado ya envió una nota al juez para pedirle más detalles sobre sus instrucciones, pero el magistrado les ordenó releerlas y proseguir con el debate, según fuentes de la defensa.
El juicio oral sobre este caso concluyó el lunes con los alegatos finales de la fiscalía y de los abogados del guerrillero de las FARC, que cumple una condena a 60 años de cárcel por el secuestro de tres estadounidenses que aun siguen en poder de las FARC.
En la vista, que duró 24 días, la fiscalía intentó demostrar la vinculación de «Simón Trinidad» con el negocio del narcotráfico internacional de las FARC.
En las audiencias, la fiscalía, encabezada por Ron McNeil, citó a declarar a ocho testigos, entre operadores de laboratorios de drogas, reinsertados de las FARC, campesinos colombianos, expertos en la lucha antidrogas, y agentes del FBI.
De ser declarado culpable, el guerrillero afronta una condena de al menos diez años de prisión.
Un primer juicio por narcotráfico de «Simón Trinidad» fue declarado nulo por el juez en octubre pasado tras casi cinco días de deliberaciones ante la falta de un veredicto unánime sobre la culpabilidad del guerrillero.
Entonces, la debilidad de las pruebas que aportó la fiscalía y la poca credibilidad de los testigos fueron determinantes para que el jurado dudara de la implicación directa del rebelde en el narcotráfico.
De hecho, siete de los miembros del jurado consideraron inocente a «Simón Trinidad», mientras que los otros cinco lo encontraron culpable.
Para que un juicio sea declarado nulo, el jurado tiene que remitir al juez tres notas en las que afirma que es incapaz de llegar a un veredicto unánime.
