En lugar de salir los viernes de «rumba», asisten a la gente de la calle

Los viernes, mientras una buena parte de la Bogotá juvenil se prepara para salir de copas, un grupo de jóvenes profesionales desafía el frío de la noche y sale a recorrer zonas críticas del centro de la capital cargados con jugos, panes y bebidas calientes, para los habitantes de la calle.

(EFE).-Al psicólogo Adolfo Castañeda y al músico Marco Puentes se les ocurrió esta idea, hace cinco años, mientras caminaban «por una calle atestada de bares y, en apenas dos metros cuadrados, mientras los jóvenes se alistaban para la fiesta, los indigentes pedían limosna. Cada uno en su universo, sin contacto alguno con el otro».

Ese día decidieron cambiar un poco la historia de sus viernes y pensaron en regalar ropa o zapatos, pero la constante es que los indigentes «venden estos artículos para poder comprar alucinógenos», según Castañeda, por lo que optaron por la comida, las sopas y el café con leche.

Lo curioso es que ninguno de estos platillos tuvieron la acogida esperada en los habitantes de la calle, calculados en más de 15.000.

Entonces, una nutricionista amiga les sugirió que un vaso de agua de panela (bebida a base de almojabana y queso) sería lo más adecuado porque aportaría calor para el frío y además, algo de nutrientes, una decisión que fue un éxito total entre los desposeídos.

Castañeda encontró eco en su colega de universidad Andrea Correa, en su amigo de la infancia el diseñador Carlos Aguirre, la abogada Ana Sarmiento y el administrador Carlos Eduardo Lozano, todos en torno a los 30 años, y crearon la asociación ‘Aguapanelita para todos’, que desde hace cuatro años funciona todos los fines de semana y al menos un día más a la semana.

Sus integrantes recorren algunos sectores sórdidos del centro de Bogotá, entre ellos el sector de San Victorino, un viejo refugio de delincuentes y drogadictos, aunque lo hacen también en otras zonas.

Además del agua de panela ofrecen un jugo de frutas al menú de cada salida y no llevan menos de 200 panes por jornada.

Por lo general, cada noche se benefician unos 300 indigentes con su labor, y mientras les sirven una taza humeante, escuchan sus historias.

El cartonero con una herida de machete en su cabeza, los profesionales que se quedaron en las calles por ir tras las drogas y el alcohol, las abuelas que fueron abandonadas o los jóvenes de otras ciudades que llegan a Bogotá a prostituirse.

«A veces queda uno contrariado. Uno se queja muchas veces por tonterías pero hay gente que en verdad está sufriendo y tienen problemas mucho más graves», asegura Andrea Correa, psicóloga y madre de una bebé de 15 meses.

Al igual que los beneficiarios, los integrantes de ‘Aguapanelitas’ también aumentan con amigos y familiares que se han unido a la causa, en presencia o en donaciones y como ejemplo afirman que con menos de 30 dólares alcanzan para preparar viandas a unas 300 personas.

La red social Facebook también ha sido un detonante positivo para la causa y, tras empezar con cerca de 200 miembros, en su mayoría amigos y familiares de los gestores, hoy ya cuentan con más de 4.200 simpatizantes, que demuestran su interés.

Incluso se han creado grupos similares en Pereira, Santa Marta y Bucaramanga. Quizá eso fue lo les motivó a construir su propia página en Internet (www.aguapanelita.org) para canalizar las ayudas y los colaboradores, donde unos 700 usuarios han hecho contacto constante.

«Es bueno que esto ocurra. Bogotá es una ciudad muy grande y con seguridad en cada sector se puede hacer una tarea similar», afirma Carlos Aguirre, quien agrega que por eso se creó otro programa llamado ‘La jornada de los diez panes’, en el que cada persona le entrega un pan a alguien que lo necesita, en el lugar donde se encuentre.

«Nosotros dimos el primer paso, pero está en cada persona continuar el camino. Si podemos ayudar, hagámoslo. Lo mejor de todo es que después de cada jornada es mucho mayor la satisfacción que el cansancio», concluye Castañeda.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Paul Monzón

Redactor de viajes de Periodista Digital desde sus orígenes. Actual editor del suplemento Travellers.

Lo más leído