La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) ha pedido hoy la puesta en marcha de una investigación internacional independiente sobre la muerte de un inmigrante subsahariano por los disparos de las fuerzas de seguridad marroquíes y la suspensión de la cooperación migratoria con Marruecos.
Los hechos ocurrieron ayer cuando las fuerzas de seguridad de ese país dispararon contra un grupo de 80 personas que intentaba cruzar por la fuerza la frontera entre Marruecos y la ciudad autónoma de Melilla.
Esta organización considera urgente una investigación para que «bajo ningún concepto» esa muerte «quede en la más absoluta impunidad», informa en un comunicado.
Además, pide que las autoridades españolas suspendan «con carácter inmediato» la cooperación migratoria con Marruecos.
«Bajo ningún concepto los controles migratorios pueden conllevar violaciones a los derechos humanos como el derecho a la vida, utilizando armas y fuego real», señala.
CEAR exige también que se garantice la asistencia sanitaria a los heridos en la operación policial y el acceso de las organizaciones sociales o sus familiares a los detenidos, que «no deberían ser deportados al desierto, en la tierra de nadie, en la frontera entre Marruecos y Argelia, como viene sucediendo en los últimos años».