(PD).- El Comité Internacional de la Cruz Roja ha confirmado este jueves que los narcoterroristas de las FARC liberaron al ex diputado Sigifrido López, quien va de camino a la ciudad de Cali (departamento de Valle del Cauca) junto con la misión humanitaria encabezada por la senadora Piedad Córdoba.
López, secuestrado en 2002, es el sexto rehén que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se comprometieron liberar en una campaña que según algunos analistas apunta a que los guerrilleros quieren ganar terreno político después de varios meses de reveses militares. López podría dar pistas acerca de los otros 11 diputados que fueron capturados con él y que murieron en 2007 en lo que el Gobierno dijo fue un enfrentamiento entre dos unidades de la guerrilla.
Los guerrilleros han entregado a López a la delegación que fue a recogerlo en un helicóptero en un sitio indeterminado en la selva, ha informado el portavoz de la Cruz Roja, Yves Heller.
En el aeropuerto de Cali, capital del Valle del Cauca y ubicada en el suroeste de Colombia, Heller ha leído un comunicado en el que informó de que «en la zona rural del Departamento de Cauca, las FARC entregaron a la senadora Piedad Córdoba y a delegados del CICR al ex diputado del Valle, doctor Sigifredo López».
«El CIRC expresa su profunda satisfacción por el regreso a casa de los doctores Sigifredo López y Alan Jara, y de cuatro miembros de la fuerza publica», dijo Heller. El portavoz hacía referencia así a los otros cinco rehenes que las FARC han entregado a esta misión humanitaria desde el pasado domingo.
Alan Jara fue liberado el martes tras más de ocho años de cautiverio, mientras que tres policías y un militar, secuestrados en 2007, recuperaron la libertad el pasado domingo.
El Gobierno del presidente Álvaro Uribe ha dado duros golpes a la guerrilla de las FARC en el último año. Tres de sus comandantes murieron el año pasado y muchos de sus miembros siguen desertando de sus filas y entregándose a las autoridades. Sin embargo, el grupo guerrillero sigue controlado amplias áreas rurales donde la presencia del Estado es débil.
Con esta campaña de liberación de secuestrados, las FARC buscan canjear a sus rehenes por rebeldes encarcelados en diferentes prisiones colombianas. Sin embargo, las negociaciones están estancadas. Los guerrilleros insisten en el retiro de tropas de una amplia zona para garantizar las negociaciones del intercambio de secuestrados por presos, pero pasadas violaciones en acuerdos similares por parte de las FARC tienen a Uribe reticente a aceptar sus condiciones.