El argentino León Gieco abre este jueves 8 de julio la XIX edición del Festival de Pirineos Sur, que este año esta dedicado a los países latinoamericanos con motivo del bicentenario de sus independencias.
«Soy como un periodista del rock, tratando de poner poesía a la realidad» han sido las palabras del artista argentino. Gieco, con casi 40 discos a sus espaldas, compartirá el escenario de Lanuza con los venezolanos ‘Los Amigos Invisibles’.
El Festival Internacional de las Culturas iniciará así un viaje, que se extenderá hasta el próximo 25 de julio, por los países latinoamericanos, a los que está dedicada la actual edición, con motivo del bicentenario de sus independencias.
Gieco, un artista referente de la música sudamericana, se ha mostrado feliz de abrir el festival oscense y ha adelantado, en el transcurso de una rueda de prensa, que ofrecerá un concierto que sirva de retrospectiva de su dilatada carrera musical compuesta por 37 discos y más de 250 canciones. «Si yo fuera parte del público me gustaría que el artista mostrara parte de su historia musical y cómo son los vínculos de sus canciones con el momento histórico que le ha tocado vivir», ha indicado el argentino.
Sin olvidar que su música ha estado siempre influenciada por el clima social que atravesaba su país, el artista ha recordado que «el rock fue en los años setenta en mi país un medio de combate contra la terrible dictadura».
Durante el concierto que ofrecerá en la noche inaugural de Pirineos Sur, Gieco utilizará una pantalla de video para proyectar diversos momentos de la historia reciente de Argentina. Por su parte, ‘Los Amigos Invisibles’ están considerados la banda venezolana con mayor proyección internacional, aunque desde el año 200 están radicados en la ciudad de Nueva York, cuentan con un Grammy Latino.
SEGUNDO AÑO DEL AUDITORIO
Este será el segundo año del renovado auditorio de Lanuza, construido el año pasado al estilo de los anfiteatros romanos, con un aforo de 4.500 personas y pudiéndose sentar en un graderío fijo 2.800, la inversión para su construcción fue de 2 millones de euros, sufragando el 75 por ciento la Diputación Provincial de Huesca y el 25 por ciento, el Ayuntamiento de Sallent de Gállego.
El espacio conserva los servicios de bar y restauración, así como el escenario flotante, y supuso una importante mejora en la comodidad, tanto de los espectadores como de los artistas.
Además en esta XIX edición, la empresa Rampa Huesca SL montará 70.000 vatios de potencia de sonido exterior y unos 20.000 vatios para monitoraje de los artistas. Para los controles habrá un doble set de mesas, tanto digitales de última generación, así como analógicas, para dar cobertura a todas las necesidades de los grupos que acudan en esta ocasión, dado lo variado de las propuestas musicales de este año.
Así mismo, se utilizarán más de cien micrófonos y tarimas con ruedas para el perfecto desarrollo del Festival, y en cuanto a iluminación, el escenario de Lanuza ha instalado miles de vatios de iluminación convencional, una treintena de cabezas móviles y numerosos tubos de tecnología led.