El chef Ricardo Sanz («Kabuki Wellington», Madrid) ha asegurado que los españoles «deberíamos tener muchísima más educación gastronómica», de forma que todos los «grandes restaurantes» que hay en todo el país estuvieran llenos cada día.
En una entrevista concedida a Efe, Sanz ha señalado que España tiene un «problema», porque cuenta con numerosos restaurantes de «muchísimo nivel» pero carece de público suficiente para llenarlos, especialmente aquellos establecimientos que están fuera de las grandes ciudades.
En su opinión, el país no tiene tanta cultura gastronómica «como parece», y eso se percibe tanto en los clientes como en los propios restaurantes.
«Si quitas la alta gastronomía -que está al mejor nivel mundial que puede existir- el resto está en pañales; por ejemplo, es muy difícil encontrar un buen pincho de tortilla en un bar o un café bien hecho», ha destacado.
Además, ha resaltado que «en general» el público prefiere «la cantidad a la calidad».
Según Sanz, a este problema se suma el de la crisis económica, que, si continúa en la misma línea, terminará afectando a todo el sector.
El chef ha afirmado que las turbulencias financieras han afectado «muy poco» al Grupo Kabuki, que actualmente cuenta con dos restaurantes en Madrid («Kabuki» y «Kabuki Wellington»), un establecimiento en Tenerife («Kabuki Abama») y un negocio de cátering («Kotobuki»).
En este sentido, ha señalado que desde los establecimientos del grupo intentan que cada cliente se sienta «como en su casa» y «bien tratado», y que todos los productos sean «muy buenos».
«También es importante que tratamos a todo el personal como a personas, y cuando hay un buen ambiente de trabajo, eso se acaba notando», ha apuntado.
El cocinero ha explicado que «Kabuki Wellington» no ha modificado su oferta por la crisis porque, a su juicio, se trata de un restaurante en el que se puede comer desde 30 euros por comensal.
«Una de nuestras reglas es que el cliente decide lo que quiere pagar cuando entra por la puerta: aquí no hay menús fijos, ni se va a mirar mal a un cliente porque pida poco», ha indicado.
En relación con el «boom» de la cocina japonesa en España durante los últimos años, ha reconocido que la gastronomía nipona llegó como una «moda», pero ya se ha convertido en una realidad que «está aquí para quedarse».
Sanz, que tuvo su primer contacto con la cocina japonesa después de que un amigo le invitara a comer a un restaurante nipón que estaba junto al lugar donde él trabajaba, asegura que sintió mucho orgullo cuando recibió la visita del presidente de la compañía de automóviles Toyota.
«Pidió venir a Kabuki y que le hiciéramos todas las cosas nuevas que preparamos y, al final de la cena, me dijo que había probado sabores que no recordaba desde su infancia», ha señalado.