Entre 1.000 y 2.000 personas, la mayoría adolescentes, se encontraban en el interior de la discoteca 'Kiss' en el momento del incendio
Al menos 233 personas, en su mayoría, adolescentes han fallecido este domingo en un incendio declarado en una discoteca del estado de Santa María, en el sur de Brasil.
El incendio ocurrió en un local de Santa María, en el sureño estado de Río Grande do Sul, fronterizo con Uruguay y Argentina, en la que se realizaba una fiesta de los estudiantes de diferentes cursos de la Universidad Federal de Santa María.
Según los testimonios recogidos por los medios brasileños, el fuego comenzó cuando el vocalista de la banda de música que se presentaba ante el público realizó un espectáculo pirotécnico.
Las chispas de las bengalas usadas impactaron contra el material de aislamiento acústico del techo, lo que hizo que se propagaran rápidamente las llamas y se extendiera una densa humareda en el recinto.
Además del uso de un artefacto no permitido dentro de un establecimiento cerrado, contribuyeron a la tragedia el pánico provocado por la rápida expansión de la humareda y la decisión de los vigilantes de cerrar las puertas para evitar que el público saliese sin pagar.
Todo apunta a que las víctimas murieron asfixiadas o aplastadas por la multitud que trataba de buscar una vía de escape.
Según estimaciones iniciales de los bomberos, recogidas por el diario ‘Zero Hora’, hay además unos 500 heridos.
Entre 1.000 y 2.000 personas, la mayoría adolescentes, se encontraban en el interior de la discoteca ‘Kiss‘ en el momento del incendio, que comenzó a las 02.00 horas de la madrugada de este 27 de enero de 2013.
«Los bomberos están buscando más víctimas y no podemos concretar el número exacto de fallecidos. La mayoría de los fallecidos murió por asfixia. Cundió el pánico y se acabaron pisoteando entre sí», declaró el comandante general del Cuerpo de Bomberos, coronel Guido de Melo.
Un petardo pudo provocar el incendio
El incendio, de acuerdo con las primeras investigaciones, comenzó en el techo de la discoteca.
Un petardo prendió la espuma de aislamiento acústico que envolvía el escenario, según informó el delegado de la Policía civil, Sandro Meinerz.
La evacuación inmediata del lugar fue dificultada por la existencia de una única salida de emergencia.
Los bomberos se vieron obligados a abrir un agujero en una de las paredes para sacar a los asistentes con mayor rapidez.