El presunto autor de la agresión que hace tres años dejó tetrapléjico a un ciudadano congoleño en una calle de Alcalá de Henares (Madrid) se enfrentará a partir de hoy a un juicio en el que el fiscal solicita para él una pena de 12 años de prisión.
En su escrito provisional de calificaciones, el Ministerio Fiscal ha pedido esta condena para el procesado, Roberto Alonso de la Varga, al acusarle de un delito de lesiones con el agravante de motivación racista, así como una indemnización de cerca de 377.000 euros.
Los hechos sucedieron el 10 de febrero de 2007, cuando el acusado pidió tabaco a Miwa Buene Monake y, al responder éste que no tenía, reaccionó de forma violeta insultando a la víctima, llamándolo «mono» y que «el único sitio donde podía estar era en el parque zoológico con sus compañeros».
A continuación, sigue relatando el fiscal, le propinó «de forma sorpresiva un fuerte puñetazo en la nuca» y se alejó del lugar afirmando: «nos están invadiendo, arriba España».
A consecuencia de la agresión, Buene Monake se desplomó en el suelo, sufriendo una «tetraplejia inmediata con gran invalidez», por lo que estuvo ingresado varios meses en el Centro Nacional de Parapléjicos de Toledo y, desde octubre de 2007, se encuentra en el Centro de Lesionados Medulares de Vallecas (Madrid).
Alonso de Varga fue detenido el día de la agresión pero permaneció en libertad hasta nueve meses después, ya que no fue hasta el 13 de noviembre de 2007 cuando el juez accedió a la petición de los abogados de la víctima y del Movimiento contra la Intolerancia (MCI), que se presenta como acusación popular.
MCI solicita también 12 años de cárcel para el acusado, argumentando en su escrito que la agresión vino motivada por «el color de la piel de la víctima» y por ser extranjero.
La acusación popular suma al delito de lesiones la agravante racial, así como la alevosía y el abuso de superioridad.
El presidente de este movimiento, Esteban Ibarra, ha afirmado a Efe que su asociación quiere «ayudar a una víctima del racismo» y reclamar una mayor atención de las autoridades contra este tipo de delitos.
Miwa Buene Monake tiene 45 años de edad y es padre de dos hijos, los cuales llegaron a España procedentes de la República del Congo después de que su padre sufriera la agresión.
Fuentes de la Fiscalía han señalado a Efe que este juicio, que se celebrará en la Audiencia Provincial de Madrid, se prevé «complicado» por la cantidad de informes médicos que se han solicitado.