El coordinador de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas, garantizó al ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, que viaja a Cuba con todo el apoyo de los populares para que respalde las gestiones de la Iglesia para lograr la liberación de presos políticos, pero le exigió que «no caiga en la tentación de apropiarse» de ellas.
Así se lo advirtió en el transcurso de una mesa redonda celebrada dentro del Campus 2010 de la Fundación FAES, que preside José María Aznar.
En la mesa también participaron la ex ministra de Asuntos Exteriores Ana Palacio, el director de la Fundación Konrad Adenauer (vinculada a la CDU alemana), Thomas Stehling; y el periodista Hermann Tertsch.
Moragas dijo que intuye que esa hipotética apropiación de las gestiones de la Iglesia cubana «puede ocurrir y por tanto es bueno decirlo de antemano para evitarlo».
Además, el dirigente popular glosó las palabras que había pronunciado al respecto la propia Palacio, quien recriminó al Gobierno que se haya convertido en «vocero del régimen castrista», lo cual significa no tener en cuenta ni los principios que caracterizan a la UE ni los intereses de los españoles.
En este sentido, Moragas corroboró que el Gobierno «no está defendiendo los intereses de España», porque algún día los demócratas cubanos accederán al Gobierno, y entonces la «imagen de complicidad» de España con el régimen castrista que habrá calado será profundamente «negativa».
También Herman Tertsch abundó en este aspecto de la política exterior española al denunciar que «somos los abogados y lobbystas de Cuba en Europa» y «estamos subvencionando todo tipo de aventuras extrañas».
Según el periodista, el Gobierno se siente más cómodo con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, de ideología similar a la castrista, que con los de Alemania y Francia, Angela Merkel y Nicolas Sarkozy.