El 31 por ciento de la población está de acuerdo o muy de acuerdo con expulsar a los inmigrantes que se queden en paro durante mucho tiempo, mientras que el 65 por ciento se manifiesta en sentido contrario, según los resultados de una encuesta de la Fundación Bertelsmann, presentados hoy.
Sobre los programas electorales, el 65 por ciento asegura que tiene en cuenta las políticas de los partidos en relación con los inmigrantes legales y el 58 por ciento con los ilegales.
La encuesta apunta que el 89 por ciento de la población está a favor de que las personas puedan vivir y trabajar en cualquier país, pero el 72 por ciento considera la inmigración como un asunto de preocupación y el 67 por ciento piensa que el número de extranjeros es elevado en España.
También el 72 por ciento cree que es mejor para un país que convivan personas de distintas religiones, aunque el 68 por ciento manifiesta que los inmigrantes deberían mantener sólo aquellas costumbres y aspectos de su cultura que no molesten a los españoles.
En general, la mayoría de los 800 encuestados (95 por ciento de ellos españoles) están favor de la convivencia e integración, pues el 83 por ciento, por ejemplo, no ve impedimento en que un hijo se case con una inmigrante y el 88 por ciento acepta que su jefe sea extranjero.
A pesar de datos como éstos, el 64 por ciento opina que los españoles deben tener preferencia al elegir el colegio de los hijos.