La Policía Nacional ha detenido a 17 personas como integrantes de una banda que se dedicaba a introducir ilegalmente en España inmigrantes pakistaníes, a los que cobraba hasta 3.000 euros por persona.
Según informó la Policía, los ciudadanos pakistaníes eran introducidos en la Unión Europea (UE) por la frontera de Grecia y posteriormente viajaban a territorio español vía Francia o Bélgica con pasaportes y tarjetas de residencia falsificados.
Las 17 detenciones se han producido en las provincias de Barcelona, Huesca y Valencia. Los arrestados están acusados de los delitos de falsificación de documentos, contra los derechos de los ciudadanos extranjeros y pertenencia a grupo criminal.
Los investigados manipulaban y falsificaban documentación oficial, por lo que cobraban hasta 3.000 euros. Los inmigrantes eran introducidos de manera clandestina en la UE por la frontera entre Turquía y Grecia para posteriormente viajar hasta nuestro país vía Francia o Bélgica con pasaportes y tarjetas de residencia falsificados.
Las pesquisas policiales se iniciaron tras detectarse unos documentos falsos aportados por un ciudadano paquistaní en una solicitud de autorización de residencia presentada en Huesca en el mes de noviembre de 2008. Los papeles ilícitos aportados a la solicitud por arraigo fueron un certificado de empadronamiento, un contrato de trabajo y un certificado de carecer de antecedentes penales en Pakistán.
El grupo desarticulado estaba dirigido por un individuo, residente en Barcelona, encargado igualmente de realizar las falsificaciones. Contaba con un colaborador en Pakistán que le remitía por medio de paquetería postal los pasaportes y documentos de identidad de las personas que iban a viajar hasta España. Después, estos documentos eran manipulados para hacer coincidir los datos de identidad con los de otras personas con residencia legal en nuestro país.