Ka Yang ha sido condenada a pasar toda su vida en la cárcel por matar a su bébe, de un mes, en el microondas. El pasado mes fue considerada como culpable y se le atribuyó un asesinato de primer grado.
Su bebé fue hallado muerto en la vivienda familiar, en sacramento (California). Las pruebas mostraban que la pequeña tenía quemaduras en el 60% de su cuerpo, a pesar de que su pelo y su ropa no sufrieron daño alguno. Lo que llevo a confirmar lo ocurrido fue el chupete que se encontró en el microondas, por lo que se deduce que metió al bebe en el aparato, lo hizo funcionar y lo tuvo ahí entre dos y cinco minutos, según ‘ ‘The Mirror‘.
En una primera declaración, Ka Yang contó que estaba con la pequeña en el ordenador y que de repente se desmayó .
Cuando despertó encontró a su hija junto a un calefactor. Sin embargo, los paramédicos no pueden apoyar su declaración, ya que cuando llegaron no la encontraron desorientadas.