Otro caso más, que se suma a una lamentable y larga lista. Esta vez la víctima ha sido una intérprete afgana de lengua pastún, de 38 años, que fue atacada por tres compatriotas en la noche del martes 18 de octubre de 2016 en los alrededores del campamento de refugiados de Calais, más conocido como ‘la jungla’. (La liberal violada y asesinada por el perverso refugiado que acogía en casa).
La desventurada acompañaba a un periodista freelance, ya que se encontraban realizando un reportaje para una televisión francesa sobre los menores aislados en tal lugar, cuando los tres ciudadanos afganos se les acercaron, según ha indicado la fiscalía de Boulogne-sur-mer.
Primero, trataron de robar el material periodístico y luego, uno de los tres individuos obligó a la interprete a mantener una relación sexual amenazándola con un cuchillo, mientras los otros dos retenían al periodista amenazándolo también con un arma blanca.
Tras los hecho, ambos acudieron a la comisaría de Calais para denunciar la violación. La mujer fue atendida por los servicios médicos en el hospital de la zona.
En declaraciones al periódico ‘Voix du Nord’, el fiscal Pascal Marconville confirmó que la víctima había sufrido una violación, tal y como indica el informe médico, y que los especialistas se centran ahora en analizar el perfil genético del agresor. Mientras tanto, continúa la búsqueda de los tres agresores.
En el campamento, conocido como la «Jungla» de Calais, viven entre 7.000 y 10.000 personas, en su mayoría inmigrantes y refugiados, en condiciones inhumanas. Esperan su oportunidad para colarse en algún tren o camión con destino a Reino Unido que cruce el Canal de la Mancha. El campamento será cerrado próximamente por las autoridades francesas, que han prometido que sus habitantes serán realojados en centros de acogida en el país.
