Las fuerzas iraquíes se preparan para la gran ofensiva final sobre el oeste de Mosul, que aún controla el ISIS, mientras el grupo yihadista ataca con uñas y dientes a los militares apostados en los barrios del este de la ciudad atravesando el río Tigris con decenas de barcos. Y mientras van cayendo los terroristas, los soldados a quienes apoyan los aviones de la coalición internacional capitaneada por Estados Unidos, enloquecen por momentos. (El vídeo de la atroz tortura y muerte de tres llorones del ISIS… ¡que cabrea a la ONU!).
Los linchamientos de los fanáticos del DAESH están a la orden del día, y el último vídeo que recoge uno de ellos tiene por protagonista a un excitado soldado iraquí que acaba de cortare la cabeza a un yihadista que lleva incluso sus gafas de sol apoyadas en la frente estilo chulesco.
Con la admiración de sus compañeros, se pavonea de haberlo mandado con Alá, mientras sostiene su trofeo amenazando al más pintando e insultando a la víctima hasta hartarse.