El ex vicepresidente estadounidense Dick Cheney fue ingresado en un hospital el pasado viernes por una afección cardiaca y se espera que sea dado de alta en menos de 24 horas.
El hospital en el que se encuentra, el de la Universidad George Washington, no había divulgado hasta el momento la naturaleza de los últimos problemas de salud de Cheney, considerado el principal ejecutor de la política de la administración de George Bush, y una de las figuras más representativas de la historia más reciente de Estados Unidos por su enconada defensa de las decisiones adoptadas por el predecesor de Barack Obama.
El departamento de Prensa de Cheney indicó que el ex vicepresidente fue ingresado a causa de una «retención progresiva de fluido relacionado con una enfermedad de la arteria coronaria», según recoge la cadena CNN.
Por este motivo, a Cheney se le ha suministrado medicación por vía intravenosa y desde su oficina se asegura que su estado ha mejorado «perceptiblemente» tras su ingreso, como pudo atestiguar su hija, Liz Cheney. «Mi padre se encuentra mejor», indicó. Se espera que Cheney, quien ha sufrido hasta cinco ataques al corazón (1978, 1984, 1998, 2000 y en febrero de este año) sea dado de alta mañana lunes.