La «actualización» del sistema económico que estudia el Gobierno de Cuba se ceñirá al modelo socialista y «no al mercado» y además se hará «con calma», dijo hoy el ministro de Economía y Planificación, Marino Murillo.
«No se puede hablar de reformas. Estamos estudiando una actualización del modelo económico. Está en estudio y con mucha calma», subrayó Murillo en declaraciones a periodistas en los pasillos de la Asamblea Nacional de Cuba.
El ministro indicó que en esta actualización «seguirá rigiendo la planificación centralizada» y aunque «se aligerarán» algunos sectores, la propiedad seguirá siendo estatal.
«Hoy el Estado tiene un grupo de actividades que se debe descargar. El Estado se tiene que ocupar en economía de las cosas más fuertes», agregó Murillo.
A preguntas de los periodistas, se refirió al «experimento» de arrendar las barberías cubanas, que se ha llevado a cabo, dijo, en todos los municipios de la isla y opinó que esa misma medida podría extenderse a otros sectores, aunque no especificó cuáles.
Pero insistió en que «todo eso está en proceso de estudio» y señaló que hay que preparar un grupo de normas jurídicas para regular ese proceso y «sin apuros», subrayó.
También descartó que Cuba quiera imitar modelos de otras economías de países comunistas, como las de China o Vietnam.
«El modelo cubano es un modelo muy, muy cubano» que, dijo el ministro, se encuadra «en la vigencia de su revolución y en la ratificación del socialismo».
«Y no nos podemos olvidar que el país más potente del mundo es nuestro principal enemigo», subrayó como segunda característica del modelo económico de la isla.
La Asamblea Nacional de Cuba, reunida hoy en sesión plenaria, tiene en agenda analizar la agenda socioeconómica de la isla, que sigue bajo una grave crisis cuando se cumplen cuatro años desde que el general Raúl Castro asumió el poder en el país.
En la primera de sus dos reuniones ordinarias del año, el Parlamento examinará entre otros, la liquidación del presupuesto de 2009, un informe sobre quejas y sugerencias de los ciudadanos y dos proyectos de ley, uno sobre seguridad vial y otro para dividir en dos una de las provincias del país, con lo que pasará a tener quince.
Se prevé que a lo largo de la sesión el presidente Raúl Castro ofrezca un discurso ante los diputados cubanos.
La prensa internacional acreditada en la isla sólo ha tenido acceso al inicio de la sesión y a la exposición de dos puntos: una declaración de protesta por la situación de un cubano preso en Estados Unidos acusado de espionaje y la nueva ley de Seguridad Vial.