Al menos 13 presidentes de Latinoamérica y el Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, asistirán este sábado a la investidura de Juan Manuel Santos como presidente de Colombia, ceremonia en la que estará acompañado también por Álvaro Uribe, el mandatario saliente, algo que no es usual.
Han confirmado su asistencia los jefes de Estado de Argentina, Cristina Fernández; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; México, Felipe Calderón; Uruguay, José Mujica; Perú, Alan García; Chile, Sebastián Piñera; y la República Dominicana, Leonel Fernández.
También estarán en Bogotá los presidentes de Panamá, Ricardo Martinelli; Honduras, Porfirio Lobo; Guatemala, Álvaro Colom; El Salvador, Mauricio Funes; Costa Rica, Laura Chinchilla; y Ecuador, Rafael Correa.
España estará representada por el heredero de la Corona, el Príncipe Felipe de Borbón.
La presencia de Correa es una de las que más expectación despierta, puesto que las relaciones diplomáticas entre ambos países están rotas desde el bombardeo militar colombiano de marzo de 2008 a un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio ecuatoriano.
Los dos países iniciaron hace casi un año un proceso de diálogo para intentar restablecer esas relaciones, que incluye varios temas «sensibles», entre ellos el proceso judicial abierto contra Santos en Ecuador por ese bombardeo, que se produjo cuando él era ministro de Defensa de Uribe.
Precisamente hoy el abogado de oficio de Santos en Ecuador confirmó que existe una solicitud de extradición contra su defendido emitida por la Fiscalía de ese país, pero aclaró que es el juez del caso el que debe darle trámite, algo que todavía no ha hecho.
El gran ausente será el mandatario venezolano, Hugo Chávez, que rompió el pasado 22 de julio las relaciones con Colombia, al considerar una «agresión» que el Gobierno de Uribe acusara internacionalmente a Venezuela de apoyar a las guerrillas colombianas.
Chávez, que anunció que no asistiría a la investidura de Santos antes de esa ruptura, sugirió para justificar su ausencia que Uribe, a quien llamó «mafioso», podría ordenar durante su visita a Bogotá un atentado en su contra.
El presidente boliviano, Evo Morales, amigo y aliado de Chávez, todavía no ha dicho si viajará a Bogotá, pero en los últimos días ha criticado duramente al Gobierno saliente de Colombia, al que acusa de ser «sirviente y obediente al Gobierno de Estados Unidos».
Con el envío de su consejero de Seguridad Nacional, James Jones, Estados Unidos demuestra la importancia que concede a la relación con Colombia, puesto que no es frecuente que vaya a las tomas de posesión un funcionario de tan alto nivel.
Paraguay, por su parte, enviará a su vicepresidente, Federico Franco, Nicaragua aún no ha confirmado si su presidente, Daniel Ortega, muy afín a Chávez, estará en la posesión y tampoco se conoce quiénes integrarán las delegaciones de otros países de la región como Cuba y Haití.
Acudirán además, el secretario de Estado de Asuntos Europeos de Francia, Pierre Lellouche, y el primer ministro de Aruba, Michael Godfried, entre otras altas personalidades.
La ceremonia de toma de posesión se celebrará en la céntrica Plaza de Bolívar de Bogotá ante unos 5.000 invitados, pero antes Santos participará ese mismo día en un ritual indígena en la Sierra Nevada de Santa Marta, en la costa del Caribe.
La crisis colombo-venezolana centrará casi todas las reuniones previas y posteriores a la investidura, con la presencia destacada del secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el ex presidente argentino Néstor Kirchner, quien se entrevistará el viernes con Uribe y Santos para tratar de mediar en el conflicto, después de haber pasado el jueves por Caracas.
Lula también quiere «fomentar el diálogo» entre Venezuela y Colombia, y ese objetivo centrará las visitas que hará entre el viernes y el sábado a ambos países.
Por otro lado, fuentes de la Presidencia de Guatemala dijeron a Efe que Colom y el salvadoreño Funes se reunirán en Bogotá con el secretario de Estado adjunto de EE.UU. para América Latina, Arturo Valenzuela, aunque Washington no ha confirmado el viaje de éste a Colombia.
Funes también mantendrá un encuentro bilateral el viernes con Uribe, según fuentes de la embajada colombiana en El Salvador.
El chileno Piñera se reunirá con el hondureño Lobo, una vez normalizadas las relaciones entre sus dos paises, que estuvieron suspendidas desde el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 contra el entonces presidente del país centroamericano, Manuel Zelaya.