El ex presidente cubano Fidel Castro ha aprovechado su intervención ante la Asamblea Nacional, la primera de los últimos cuatro años, para pedir al presidente estadounidense, Barack Obama, que evite una guerra contra Irán.
«Un hombre tendrá que tomar la decisión en solitario, el presidente de Estados Unidos, con seguridad. Por sus múltiples ocupaciones no se ha dado cuenta todavía, pero sus asesores sí empiezan a comprenderlo», apuntó Fidel Castro en un acto en el que también estaban presentes el presidente cubano, Raúl Castro, y otros altos cargos del régimen.
«Todo cuanto el hombre pretende tiene un límite que no puede sobrepasar, en este caso crítico el presidente Barack Obama es el que tendría que dar la orden del tan anunciado y pregonado ataque, siguiendo las normas del gigantesco imperio», prosiguió, según recoge Telesur.
En el mismo instante en que diera la orden, dijo Castro, «un incontable número de proyectiles nucleares acumulados en una absurda competencias entre las potencias, estaría ordenando la muerte instantánea no solo de cientos de millones de personas» sino » también un incalculable número de habitantes de su propia patria».
El ex presidente y líder revolucionario recordó que el poder del arsenal nuclear acumulado en la actualidad por las potencias es 450.000 veces superior al de las bombas que destruyeron las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki. Si se tuviera esto en cuenta, «los países más poderosos del mundo, aliados o adversarios, con la excepción de Israel, exhortarían a Obama de que no lo haga, el mundo le rendirá después todos los honores que le corresponde».
Si la guerra estallara, dijo, «el orden social vigente desaparecerá abruptamente, y el precio sería infinitamente mayor». Por el contrario, si se evitara la guerra «la población puede ser regulada, los recursos no renovable preservados, el cambio climático evitado, el trabajo útil de todos los seres humanos garantizado, los enfermos asistidos, los conocimiento esenciales, la cultura y la ciencia al servicio del hombre asegurados. Los niños, los adolescentes y los jóvenes del mundo no perecerán en ese holocausto nuclear».