El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, comenzó hoy en Brasil el tratamiento para un cáncer linfático, que según los médicos no supondrá un impedimento para sus funciones de gobierno, que él quiere asumir cuanto antes.
El equipo médico que lo atiende en el hospital Sirio-Libanés de la ciudad de Sao Paulo empezó hoy a someter al mandatario a quimioterapia, un tratamiento que se prolongará durante seis sesiones en los próximos meses.
Los últimos exámenes realizados corroboraron que Lugo está aquejado de un linfoma en «estadio 4», lo que significa que además de los ganglios y el tórax, le ha afectado una vértebra, en la que se le generó una «lesión ósea extralinfática», en palabras del hematólogo paraguayo Alfredo Boccia.
A pesar de que el cáncer haya afectado a la tercera vértebra, los oncólogos aseguraron que es «muy difícil» que se produzca metástasis en este tipo de dolencias.
Antes de comenzar el tratamiento, el mandatario se mostró animado y, en un mensaje enviado a la nación paraguaya a través del portal en internet de la Presidencia, se declaró «aliviado» porque su enfermedad le permitirá llevar «una gestión normal».
El jefe del Estado añadió que desea entregarse «plenamente y con toda» su voluntad a la causa de gobernar, para la cual fue elegido el 20 de abril de 2008.
«Estoy ansioso por retornar en las próximas horas a Paraguay. El proceso de diagnóstico y el tratamiento por parte de los médicos del hospital ha sido excelente, hospitalario y altamente profesional. Dentro de pocas horas, al retornar a Paraguay, estaré en la etapa fundamental de este proceso con todo el tratamiento que mi dolencia requiere», afirmó el presidente en la nota.
Cada una de las seis sesiones de quimioterapia durará entre seis y siete horas, en las que serán suministradas cinco medicinas diferentes, y serán aplicadas con intervalos de entre 21 y 25 días.
Después de esta primera sesión, que se prolongará hasta la madrugada del viernes, los médicos han recomendado que Lugo mantenga reposo durante toda la jornada y que regrese el sábado a Asunción, donde proseguirá el resto de su tratamiento y donde le espera su agenda de gobierno.
Según el jefe de Gabinete del Gobierno paraguayo, Miguel López Perito, tras el descanso del viernes, Lugo cumplirá los compromisos que tiene programados para el sábado 14 y el domingo 15.
El sábado participará en Asunción del IV Foro Social de las Américas, que fue inaugurado hoy.
El domingo tiene previsto encabezar las celebraciones por el segundo aniversario del comienzo de su mandato, que supuso el final de hegemonía del conservador Partido Colorado, que se mantuvo en el poder durante 61 años.
En su mensaje al pueblo paraguayo, Lugo se refirió a esta «fecha de alto simbolismo» que dijo esperar que sirva para recordar «la necesidad de seguir construyendo el cambio que no se detiene en Paraguay».
Antes de comenzar la quimioterapia, Lugo recibió la visita del vicepresidente de Brasil, José Alencar, quien también estaba ingresado en el mismo hospital para tratarse de un cáncer y pasó a dar ánimos al mandatario paraguayo cuando recibió el alta.
Los dos políticos hablaron «básicamente» de la salud de Lugo, aunque también trataron de asuntos bilaterales entre Brasil y Paraguay, según dijo a Efe el ministro de Información de Paraguay, Augusto dos Santos.
Lugo, de 59 años, está ingresado desde el martes en el hospital Sirio-Libanés de Sao Paulo, uno de los centros de referencia en América Latina en diagnóstico y tratamiento oncológico, a donde acudió para evaluar el alcance de la enfermedad que le fue detectada la semana pasada, al extraerle un ganglio inguinal inflamado.