"Me atrevo a hacer un exhorto de mi corazón humanitario a los poderes respectivos para que a estas personas, sin importar quiénes sean, se les dé alguna medida de beneficio cautelar, que vayan a su casa con su familia"
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo antes de partir a La Habana que los «políticos presos» merecen beneficios como casa por cárcel, además de todo el tratamiento médico necesario, independientemente del delito que hayan cometido, y solicitó al Poder Judicial tomar en cuenta estos casos.
«Yo no soy el dictador que va a dar órdenes a los demás poderes», dijo Chávez, y señaló que aunque era decisión del Poder Judicial otorgar beneficios a los presos, sí se atrevía a hacer «un exhorto» para que se les dé algún beneficio a los privados de libertad que están enfermos.
«Me atrevo a hacer un exhorto de mi corazón humanitario a los poderes respectivos para que a estas personas, sin importar quiénes sean, se les dé alguna medida de beneficio cautelar, que vayan a su casa con su familia y que además tengan todo el tratamiento que necesitan», dijo Chávez.
El Presidente hizo el comentario durante el consejo de ministros «extraordinario» que celebró desde el palacio presidencial de Miraflores para dar instrucciones a su Gabinete.
De acuerdo con el Mandatario venezolano, el monseñor Mario Moronta le solicitó intercediera por un grupo de presos que tenían problemas de salud.
«Yo le dije que me estaba leyendo la mente (…) porque estaba viendo casos de algunos ciudadanos que están privados de libertad y que necesitan alguna resonancia, que algunos llaman presos políticos; en verdad en Venezuela no hay presos políticos, quizá algunos políticos presos, que es otra cosa», señaló Chávez.
El Presidente comentó que le prometió al sacerdote que haría la solicitud al Poder Judicial porque se había comprobado que algunos de estos «políticos» presos tenían algún tipo de dolencia grave, «incluso cáncer».
No obstante, el Mandatario aclaró que estos beneficios no deberían ser solo para los «políticos presos», cuyos casos, señaló, «han sido tomados como banderas» para acusarlo a nivel internacional de violar los derechos humanos.
El gobernante dijo que el Ministerio de Salud también debía formar parte de este proceso de atención a los presos enfermos.