El juez salvadoreño Carlos Calderón notificó hoy a nueve militares, detenidos desde el domingo en San Salvador, los cargos que les imputa la justicia española por su presunta participación en la matanza de seis jesuitas y dos de sus empleadas en 1989.
Los nueve militares, que se entregaron el domingo en la Brigada Especial de Seguridad Militar, en San Salvador, forman parte de un grupo de 20 uniformados señalados como los responsables de la matanza, cometida en El Salvador el 16 de noviembre de 1989.
Los nueve militares, todos en situación de retiro, fueron notificados de los cargos que les imputa la justicia española por Calderón, titular del Juzgado Décimosegundo de Paz, en la sede de Brigada Especial de Seguridad Militar, informó un comunicado del Poder Judicial salvadoreño.
El documento precisó que, además de la notificación, «Calderón realizó una inspección en dicho lugar, para constatar las condiciones en las que permanecen los procesados».
El juez «realizó un informe escrito para remitirlo a la Corte Suprema de Justicia, para que la Corte Plena decida si procede o no la extradición, y asigne así a un juez que materialice la extradición de los militares», indicó el comunicado.
Añadió que «el juez también solicitó un informe a las autoridades de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) para conocer sobre la orden de captura que pesa sobre los ex militares».
El Ministerio de Defensa de El Salvador puso este lunes a la orden del Juzgado Décimosegundo de Paz a los nueve militares que se entregaron y que son parte de los 20 procesados por el juez de la Audiencia Nacional española Eloy Velasco por la masacre de los jesuitas.
Velasco ordenó la captura de todos los implicados en la matanza el 30 de mayo pasado.
Los militares que se entregaron a las autoridades salvadoreñas son los generales Rafael Humberto Larios y Juan Rafael Bustillo, y los coroneles Francisco Elena Fuentes y Juan Orlando Zepeda.
También los tenientes José Ricardo Espinoza Guerra y Gonzalo Guevara Cerritos; los sargentos Antonio Ramiro Ávalos Vargas y Tomás Zárpate Castillo, y el cabo Oscar Mariano Amaya Grimaldi.