El 53 por ciento de los bolivianos desaprueba la gestión del presidente, Evo Morales, lo que representa un aumento de 28 puntos de este índice desde que fuera reelegido en el cargo, en diciembre de 2009, según revela una encuesta elaborada por la consultora Ipsos para el diario ‘Página Siete’.
Esta es la segunda cifra más alta de desaprobación que tiene el presidente boliviano debido a la crisis con las comunidades del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), que ha marcado la recta final de 2011.
A mediados del mes de agosto más de 1.500 indígenas del TIPNIS emprendieron una marcha hacia La Paz para protestar por la construcción de una carretera entre los departamentos de Beni y Cochabamba. La presión social obligó a Morales a suspender el proyecto hasta la celebración de un referéndum.
La segunda cifra más alta de desaprobación, un 63 por ciento, se registró a principio de 2011, cuando Morales se vio obligado a retirar un decreto presidencial mediante el cual subía el precio de los hidrocarburos, conocido popularmente como ‘gasolinazo’, apenas cinco días después de haberlo aprobado.
En cambio, el 35 por ciento de los bolivianos aprueba la gestión del presidente, justo la mitad que el 70 por ciento que le expresó su respaldo en enero de 2010, después de obtener la reelección con el 64 por ciento de los votos.
El análisis por ciudades, muestra que El Alto sigue siendo el bastión de Morales, ya que allí el 53 por ciento de la población apoya su gestión, frente al 34 por ciento que la rechaza. En cambio, Cochabamba y La Paz son las ciudades donde obtiene peores cifras, con un 69 y un 52 por ciento de desaprobación, respectivamente.
Para elaborar la encuesta Ipsos entrevistó de forma directa a 1.303 adultos de ambos sexos y de todos los estratos socioeconómicos en las principales ciudades de Bolivia –La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y El Alto– entre el 2 y el 11 de diciembre.