Una vida de grandes lujos. Así es el día a día de Feras El Aissami, el hermano del vicepresidente económico de Venezuela, Tareck El Aissami, acusado por narcotráfico, lavado de activos y vínculos con Hezbollah. A pesar de su amor por el régimen chavista, vive en Uruguay, reveló el programa Santo y Seña de Monte Carlo TV.
El Observador, detalló que Feras El Aissami llegó a Montevideo a mediados de año y obtuvo la residencia provisoria junto a su esposa e hijos. En el mes de julio, la familia alquiló una casa en el lujoso barrio de Carrasco por USD 4.000 por mes.
El diario, confirma la operación y agrega que el pago se hizo mediante una transferencia bancaria desde Venezuela a un banco privado de Montevideo. Toda la transacción se hizo nombre de la esposa de Feras y se pagó un año de alquiler por adelantado. Además, compraron una camioneta de alta gama y sus hijos asisten a un prestigioso colegio privado de Carrasco.
Joseph Humire, director ejecutivo del Centro para una Sociedad Libre y Segura, una organización de investigación con sede en Estados Unidos, aseguró en el informe de Santo y Seña que Feras El Aissami es el financista de una red de empresas que opera en Venezuela, en Centroamérica y en Medio Oriente para el lavado de activos del narcotráfico, «pero también estaban lavando dinero que era proveniente para financiar actividades de Hezbollah».
Tareck El Aissami, de origen sirio-libanés, es uno de los principales dirigentes chavistas investigados por la DEA por narcotráfico.En los últimos años, supo consolidar su influencia en la cúpula del régimen bolivariano. (Tareck el Aissami, Nº 2 de Maduro, es el cerebro de los negocios sucios del régimen venezolano)
Gracias a su radical manera de expresar apoyo a la «revolución», se ganó la simpatía de Hugo Chávez, quien, ante la necesidad de sumar «caras nuevas» para mostrar una imagen distinta del chavismo, lo sumó a su gabinete en 2007.
El Aissami se desempeñó como viceministro de Seguridad Ciudadana y luego reemplazó a su jefe inmediato, Ramón Rodríguez Chacín, en el Ministerio del Interior y Justicia, cargo que desempeñó hasta 2012.
En esos tiempos en que comenzó a deteriorarse la salud de Chávez, El Aissami empezó a acumular cada vez más poder dentro de las filas de su partido (es vicepresidente de la región centro-occidental del Partido Socialista Unido de Venezuela) y también a nivel nacional. Sin embargo, su gestión en el gabinete chavista se vio marcada por las acusaciones de narcotráfico. (Tareck El Aissami: El ‘Capo de la droga’ venezolano es viceprecidente del regimen chavista)
En febrero de 2017, Tareck El Aissami fue sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y sus vínculos con el grupo terrorista Hezbollah