"Tratan de legalizar millones de inmigrantes que han violado nuestras leyes y ponerlos a competir con trabajadores estadounidenses"
El grupo Americanos por una Inmigración Legal (ALIPAC) pidió a los estadounidenses que contacten a sus congresistas para oponerse al proyecto de ley de legalización de indocumentados presentado ayer por congresistas demócratas encabezados por el representante Luis Gutiérrez.
Gutiérrez, junto a otros legisladores, presentaron en el Capitolio la legislación Reforma Migratoria Integral para la Seguridad y Prosperidad de Estados Unidos 2009 (CIR ASAP).
«La gente está horrorizada y traicionada por los oficiales electos que pretenden legalizar a los ilegales, detener a la Policía para que haga su trabajo, y desmejorar la seguridad en la frontera», afirmó en un comunicado William Gheen, presidente de ALIPAC.
La organización, con sede en Raleigh, capital de Carolina del Norte, y con 30.000 seguidores a nivel nacional, contribuyó en 2006 y 2007 a derrotar legislaciones anteriores que pretendían sacar de la sombra a más de 12 millones de inmigrantes sin papeles.
«Solicito que se unan a nuestra base de datos de correos electrónicos. Nos sigan en Facebook, Twitter, y Myspace en los esfuerzos por detener esta amnistía», enfatizó Gheen.
Gheen tildó de «traidores» a Gutiérrez, grupos pro-inmigrantes como La Raza, MALDEF, LULAC, y el Foro de Inmigración Nacional por apoyar la situación actual que «hace daño» a los inocentes estadounidenses.
«Tratan de legalizar millones de inmigrantes que han violado nuestras leyes y ponerlos a competir con trabajadores estadounidenses. Esto costará a los contribuyentes miles de millones de dólares cuando hay 15 millones de desempleados», apuntó.
En Carolina del Norte, ALIPAC movilizó a sus seguidores en 2007 para impedir que los legisladores estatales aprobaran una ley que permitiría a los estudiantes sin documentos ir a los colegios comunitarios o la universidad pagando la matrícula como residentes legales.
También ha colaborado con grupos de otros estados para bloquear propuestas de ley que de alguna manera favorecían a inmigrantes sin estado migratorio legal.
Para convertirse en ley, la reforma migratoria requerirá al menos 218 votos en la Cámara de Representantes de un total de 435 y 60 de 100 en el Senado.
Se espera que el senador demócrata de Nueva York, Charles Schumer, y el republicano de Carolina del Sur, Lindsey Graham, presenten a principios de 2010 la versión en el Senado del proyecto de inmigración.