Además de las 16 toneladas de fuegos artificiales, la juerga incluye shows musicales con artistas populares, como el grupo Paralamas y el cantautor Lulu Santos
Por lo menos 18 personas han fallecido en Río de Janeiro, aplastados por los derrumbes causados por las fuertes lluvias que azotan la ciudad brasileña.
La tragedia, que continua, tiene lugar en medio de los preparativos para la fiesta de Año Nuevo que suele atraer a unos dos millones de personas a la famosa playa Copacabana.
Según el Cuerpo de Bomberos, la peor tragedia ocurrió en la favela de Jacarepaguá, en la zona Oeste de Río, donde un alud de tierra soterró una casa y causó la muerte a una pareja y a sus tres hijos, uno de ellos un niño de dos años.
La madre de los niños llegó a ser rescatada con vida después de cinco horas de intensas búsquedas durante la madrugada, pero falleció antes de llegar al hospital.
En Niterói, en la región metropolitana de Río, dos hermanas de tres y doce años de edad también murieron soterradas al derrumbarse su casa, mientras que en la localidad de Belford Roxo un alud causó la muerte de una adolescente de 17 años y de su hija, nacida hace sólo tres días.
Otras siete personas, entre ellas un niño de siete años de edad, murieron en los barrios de Cascadura, Irajá y Vaz Lobo, y en los vecinos municipios de Magé, São João de Merití y Duque de Caxías, donde la inundación desalojó a por lo menos 192 personas.
Según el servicio de meteorología, hay un 90 por ciento de posibilidades de que llueva durante el espectáculo pirotécnico de 15 minutos que saludará la llegada de 2010 a la media noche en Copacabana.
Sin embargo, las autoridades municipales aseguraron que las condiciones climáticas no perjudicarán la fiesta que, además de las 16 toneladas de fuegos artificiales, incluye shows musicales con artistas populares, como el grupo Paralamas y el cantautor Lulu Santos.
Ante la tragedia causada por las lluvias, sin embargo, difícilmente la fiesta será tan alegre como en años anteriores.