La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) mexicana anunció hoy la apertura de una investigación contra 248 de sus agentes «para determinar si cometieron conductas irregulares» al insubordinarse y manifestarse por los abusos y malos tratos que podrían haber cometido contra ellos cuatro de sus mandos.
En un comunicado la dependencia sostuvo que «llegará hasta las últimas consecuencias» y podría imponer «sanciones» contra aquellos agentes «que haya incurrido en anomalías» en la protesta pública que ayer protagonizaron delante del hotel La Playa, donde se hospedaban sus mandos, a los que acusan de tener vínculos con la delincuencia.
Según la dependencia, a cuyo cargo está la Policía Federal y, en este caso, la seguridad de Ciudad Juárez, existen «los canales conducentes y apropiados para que todo aquel personal que deseé expresar alguna queja o irregularidad lo haga de manera segura y confiable».
El caso ha suscitado gran revuelo este fin de semana en México debido a la gravedad del caso y a la amplia difusión que recibió la protesta de los más de doscientos agentes precisamente en la urbe que está considerada la más violenta de México.
Ayer, horas después de la protesta de los agentes, la Unidad de Asuntos Internos de la policía «separó de sus cargos a cuatro comandantes», mismos que quedaron a disposición de las autoridades «por presuntos actos indebidos» en el desempeño de sus funciones en Ciudad Juárez.
Los mandos se encuentran ya en Ciudad de México a disposición de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) para que realice las investigaciones sobre su posible colusión con los criminales.
Caso de que se determine que cometieron algún «delito» o «acto indebido», la SSP «procederá de manera inmediata a darlos de baja», señaló la dependencia.
