Ecuador solicita protección para el superviviente de la matanza en la que murieron 72 personas en México

La Secretaria Nacional del Migrante de Ecuador, Lorena Escudero, solicitó este jueves al Gobierno de México que garantice la protección necesaria para el ciudadano ecuatoriano que sobrevivió a la matanza ocurrida en el estado mexicano de Tamaulipas, en el noreste del país, en la que murieron a balazos un total de 72 personas, casi todos inmigrantes latinoamericanos indocumentados según las investigaciones preliminares.

Escudero anunció además que el Gobierno ecuatoriano ya había enviado a varios funcionarios a México para brindar la asistencia necesaria para el superviviente. El objetivo del viaje es «apoyar a nuestro compatriota allá y, si es necesario, traerlo a Ecuador», dijo en declaraciones recogidas por el diario ‘El Universo’.

«En base a la autorización recibida este jueves a las 08:00, viajaron a Tamaulipas la cónsul del Ecuador en México, Verónica Peña, acompañada de los oficiales de la Agregaduría de Policía, Coronel Héctor Paredes y Mayor Víctor Hugo Zárate», informó la Secretaría Nacional del Migrante (SENAMI) en un comunicado.

SENAMI anunció además que el Gobierno de México ha facilitado un avión para que se desplacen a la región de Tamaulipas (al noreste mexicano) funcionarios de las embajadas de Brasil, Honduras, El Salvador y Ecuador, países de donde se presume que son los 72 inmigrantes víctimas de la matanza.

Los cuerpos de las víctimas, 58 hombres y 14 mujeres, fueron hallados el pasado martes por efectivos del Ejército mexicano en un rancho cercano a la localidad de San Fernando, gracias a que el único superviente, identificado como Luis Freddy Lala Pomavilla por la Cancillería de Ecuador, alertó a las autoridades de lo ocurrido.

Según las investigaciones preliminares, casi todos procedían de diversos países de Centroamérica y Sudamérica y tenían como objetivo entrar en Estados Unidos. La Secretaría de Gobernación (Ministerio del Interior) de México confirmó este jueves que las víctimas fueron ejecutados por un grupo del crimen organizado, presumiblemente ‘Los Zetas’.

De acuerdo con versiones de la prensa mexicana, el secuestro de inmigrantes que quieren cruzar la frontera que separa México de Estados Unidos es utilizado por los cárteles del narcotráfico para financiarse, sometiendo a los migrantes a extorsión, violencia y robo.

En ocasiones son forzados a dar los números telefónicos de parientes en Estados Unidos o en su país de origen para exigir un pago por su liberación y en otras les exigen que se unan a ellos como sicarios para desarrollar funciones criminales.

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