"Veo a Libia como un miembro del Movimiento de Países No Alineados y un Estado soberano de los casi 200 de la Organización de Naciones Unidas", ha subrayado
El ex presidente cubano Fidel Castro ha aclarado que no comparte «concepciones políticas o de carácter religioso» con el líder libio, Muamar Gadafi, pese a que mantiene una postura en contra de la intervención «fascista» de la «criminal» OTAN en esa nación africana.
«No comparto con el líder de ese país (Libia) concepciones políticas o de carácter religioso. Soy marxista-leninista y martiano, como ya he expresado», ha enfatizado Castro en un nuevo artículo de sus ‘Reflexiones’ divulgado este martes por el portal Cubadebate.
«Veo a Libia como un miembro del Movimiento de Países No Alineados y un Estado soberano de los casi 200 de la Organización de Naciones Unidas», ha subrayado.
Desde que comenzaron las revueltas en Libia, el ex mandatario ha dedicado varios de sus escritos a alertar sobre la intervención militar de la OTAN y sus consecuencias en la paz mundial. La semana pasada se anunció oficialmente que la Alianza tomará el mando de las acciones en Libia. «No había que ser adivino para saber lo que preví con rigurosa precisión», ha resaltado.
A pesar de las supuestas diferencias con Gadafi, el líder cubano ha insistido en repudiar el despliegue de las fuerzas de otros países en Libia, pues considera que «cualquier ciudadano honesto, sea cual fuere su posición ante el gobierno, se opondría a la intervención militar extranjera en su patria».
Así, ha advertido de que «jamás» un país había sido «víctima de un ataque tan brutal por la fuerza aérea de una organización belicista», ni siquiera «hace 75 años cuando los bombarderos nazis atacaron objetivos en España».
«Ni siquiera los líderes fascistas de Alemania e Italia fueron tan sumamente descarados a raíz de la Guerra Civil Española desatada en 1936, un episodio que muchos tal vez hayan recordado en estos días», ha acotado.
Castro ha alertado además de que «si Gadafi hace honor a las tradiciones de su pueblo y decide combatir, como ha prometido, hasta el último aliento junto a los libios que están enfrentando los peores bombardeos que jamás sufrió un país, hundirá en el fango de la ignominia a la OTAN y sus criminales proyectos».
En este contexto, el ex mandatario cubano ha hecho referencia también a la crisis nuclear que ha surgido en Japón tras el terremoto del pasado 11 de marzo que ha dejado unos 30.000 muertos y desparecidos. «Este conjunto de circunstancias determinan una situación dramática para nuestro mundo», ha lamentado.