HOUSTON, 8 (Reuters/EP)
Las autoridades del estado norteamericano de Texas finalmente han ejecutado a Humberto Leal García, un mexicano condenado por violar y asesinar a una chica de 16 años en 1994, a pesar de que la Casa Blanca había solicitado que retrasaran la ejecución.
La pena de muerte se ha hecho efectiva alrededor de las 19.00 de la tarde del jueves (1.00 de la madrugada del viernes en España) mediante una inyección letal en la prisión estatal de Hunstville, tal y como estaba previsto.
La ejecución se ha llevado a cabo poco después de que la Corte Suprema de Estados Unidos rechazara por cinco votos en contra y cuatro a favor la solicitud cursada por la Casa Blanca para retrasar un mes la medida.
México y Naciones Unidas también habían pedido al gobernador de Texas, Rick Perry, que suspendiera temporalmente la ejecución porque Leal García no fue informado de su derecho a recibir asistencia diplomática cuando fue detenido. Esta es una de las garantías que recoge la Convención de Viena, a la que Estados Unidos está sujeto, por lo que al matar al mexicano podría violar este tratado internacional.
Texas ejecuta a más delincuentes que cualquier otro estado del país, lo que ha contribuido a tensar las relaciones con México, donde no existe la pena de muerte. En 2002, el mexicano Javier Suárez Medina fue ejecutado pese a las objeciones del entonces presidente, Vicente Fox. En 2008, José Medellín, otro mexicano, fue también ejecutado a pesar de que tampoco recibió asistencia diplomática.