La Policía de Scranton, en Pensylvania, está buscando a una madre y un padrastro, acusados de castigar a su hijo de 7 años encerrándole en un ataúd en su propio sótano, según publica el diario «Citizens voice».
Lori Gardner, de 26 años, y Brian Sleboda, de 31 años, han sido acusados de poner en peligro el bienestar del menor y de retención ilegal.
Fueron los vecinos quienes desburieron al niño gritando en el trastero y llamaron a la Policía el pasado 26 de septiembre. Cuando los agentes llegaron a la casa familiar se encontraron al niño vestido solo con una camiseta y un pañal.
«Tengo hambre, aún no he cenado», dijo el niño a la Policía, quien aclaró que sus padres le metían a menudo en la caja como forma de castigo y que en ese caso había sido su padrastro quien le había encerrado.
