Ana, una mujer de 65 años de Ribeira (La Coruña), no se explica cómo se ha convertido en protagonista en las redes sociales sin saberlo: «No sé a qué viene tanto revuelto».
Y es que su imagen en bata, al borde de la cornisa de un cuarto piso para limpiar las ventanas, ha escandalizado a vecinos e internautas, que la han bautizado como la spiderman gallega.
ERRE QUE ERRE
En el vídeo, la arriesgada ama de casa no le da inportancia al hecho: «Es cosa de toda la vida», y no piensa por tanto cejar en su empeño por dejar como los chorros del oro los cristales, mal que le cueste la vida… que Dios no lo quiera.
Su peligroso atrevimiento se queda corto en comparación con otro hombre grabado cuando pasaba de ventana en ventana, limpiacristales en mano, sin arneses ni conocimiento.