Jennifer Crambelett y su pareja tenían muy claro lo que querían cuando acudieron a un banco de esperma. Deseaban el esperma de un hombre blanco, rubio y con ojos azules etiquetado con el número 380.
Sin embargo, recibió el del número 330, que correspondía a un hombre afroamericano, después de que un empleado de la clínica escribiera mal el número del donante. Aunque Cramblet y su pareja, Amanda Zinkon, quieren a su hila Payton de tres años, han decidido demandar por el error.
TEMORES
La pareja y su hija viven en una comunidad predominantemente blanca y tienen miedo de que su hija de raza mixta se sienta fuera de lugar. Cramblett dice que el error en la inseminación, que descubrió cuando estaba embarazada, le ha causado estrés, dolor y sufrimiento, según informa Daily Mail.
Cramblett admite que por la educación que ha recibido tenía prejuicios sobre las personas negras. Solo conoció a una persona negra cuando llegó a la universidad y ahora temen que su hija sea la única no blanca en su clase del colegio.
Además, la comunidad en la que viven, profundamente conservadora, podría no aceptar a su hija por lo que la terapeuta de la pareja les ha aconsejado que se trasladen a otra zona donde haya más diversidad.
La semana pasada la demanda de la pareja fue rechazada porque no había habido negligencia médica y el bebé nació sano. Ahora, la pareja espera reunir el dinero suficiente para poder volver a llevar el caso a los tribunales en diciembre de este año.