El tailandés es un imbécil de mucho cuidado, digan lo que digan. Y para muestra el vídeo que acompaña a estas líneas, donde le da de tortas y patadas a un pobre mono con el eco de las carcajadas del memo del amigo de fondo.
El joven estaba borracho perdido, y se encontró al animal sentado en su hortera moto. No se le ocurrió nada mejor que lanzarle un zapatazo. El simio reaccionó, cómo no, de la peor manera posible…