Se salvaron de milagro. Las impactantes imágenes que llegan desde la localidad de Strunino, a 110 kilómetros de Moscú, muestran a una familia acorralada por las llamas y el humo. El padre lanza una alfombra a la calle y reclama a voces la ayuda de los vecinos.
Una veintena de personas se junta y sujeta la alfombra en la acera. La madre es la primera en saltar, y luego el padre lanza a sus dos hijos, una bebé de 11 meses y una niña de 5 años. Finalmente se tira él, siendo el único que tuvo que ser hospitalizado, con heridas graves en la columna.