Todo eran especulaciones desde el pasado viernes 22 de julio de 2016, cuando Catherine Stalker, una mujer australiana de 29 años, desapareció sin dejar rastro en la ciudad de Brisbane mientras jugaba al Pokémon Go.
Sin embargo durante esas últimas horas se ha cumplido el peor de los presagios, al haber sido encotrado su cadáver cerca de su casa. Según da cuenta ‘Daily Mail‘, se ha suicidado.
La joven era muy aficionada de este nuevo juego de realidad aumentada, hasta tal punto que participaba junto con otros jugadores en las «cazas masivas», es decir, un grupo grande salía a cazar pokemons juntos de forma masiva.
Su hermana gemela Fiona, había avisado por las redes sociales del suceso para intentar dar con su paradero. Agradeció a todos los internautas ya la policía la labor que habían realizado para intentar encontrarla:
«Hemos encontrado a nuestra Cate, se ha quitado la vida. Gracias a todos los que nos ayudaron, nos sentimos apoyados y queridos. Por favor, cuidaros vosotros y a todos los que os rodean».
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