(PD/EFE).- Siete de cada diez inmigrantes que viven en España reconocen sentirse bastante o plenamente adaptados a las costumbres y estilos de vida del país, siendo los ingleses (90%) y los colombianos (84%) los más integrados, y los rumanos (64%) y marroquíes (71%) los que menos.
Así se desprende de un estudio elaborado por la consultora Salvetti & Llombart para el Grupo AXA Winterthur a partir de 700 entrevistas a personas de siete nacionalidades distintas, con edades comprendidas entre los 20 y 64 años y con un período mínimo de dos años de estancia en España.
El informe divide a los nuevos residentes en dos grandes grupos, según el objetivo que les llevó a emigrar a España, siendo éste económico (ecuatorianos, bolivianos, colombianos, marroquíes y rumanos) o en busca de una mejor calidad de vida (ingleses y alemanes).
En general, el 76% de los encuestados se siente integrado en la sociedad española.
Ganas de volver a su país
Al ser preguntados sobre las intenciones de regresar a su país de origen, el 38% de los encuestados confiesa que lo hará «seguramente o con mucha probabilidad» en los próximos años.
En este sentido, los bolivianos conforman el colectivo que tiene unas mayores perspectivas de regresar a su país (55%), seguido de los ecuatorianos (53%), los colombianos (43%), los marroquíes (35%), los alemanes (33%), los rumanos (29%) y los ingleses (14%).
Objetivos, desde una vivienda a traer a su familia
Prosperar económicamente es la principal preocupación de más de la mitad de los inmigrantes que residen en España, que también muestran su inquietud por prosperar profesionalmente (26%), por poder adquirir de vivienda (18%), por poder traer al país a su familia (18% en el segmento economía) y por garantizar el futuro de los hijos.
En cuanto a la vivienda, el 85% de las personas que emigran para prosperar económicamente opta por el arrendamiento, al no disponer de suficientes recursos económicos. Este porcentaje se ve reducido al 50% en el caso del grupo «calidad de vida» que dispone mayoritariamente de su propia vivienda.