(Gregorio Cristóbal Carle).-Después del clima prebélico vivido en Bolivia con motivo de la intransigente intención del gobierno de aprobar la ilegal y racista Constitución Política del Estado y no devolver los beneficios del IDH a quién corresponde, tras la tensa calma que ha seguido a los luctuosos acontecimientos de Pando, Evo Morales Ayma continúa apostado por la violencia para presionar a la oposición y sacar su pérfido proyecto adelante.
Es importante que el mundo sepa que Santa Cruz de la Sierra se encuentra sitiada por las hordas campesinas afectas a la causa indigenista, y que el mandatario sigue enviando efectivos armados desde todos los rincones del país con la única finalidad de amedrentar a los ciudadanos y dirigentes políticos de la región autonomista… por el momento. Que nadie dude de que el plan está ya trazado desde hace muchos días, y que si finalmente no se llega a un acuerdo en la mesa de negociaciones instaurada en Cochabamba, éstos fariseos y manipuladores no dudarán en dar la orden de disparar contra sus conciudadanos.
Mientras tanto, los organismos internacionales vuelven a demostrar su inutilidad e ineptitud, proclamando que Evo Morales ha sido electo en las urnas y que, por lo tanto su régimen está ungido por la sagrada legalidad democrática. Yo me pregunto si el Sr. Insulza –representante de la OEA- es ciego o simplemente no quiere ver las cosas, más aún cuando ha podido observar “in situ” el triste acontecer diario en el país andino. Y me cuestiono su postura porque no quiero pensar que responde a oscuros intereses provenientes de no se sabe que sitio.
Lo mismo se puede decir de Unasur, una institución que ha perdido toda su credibilidad nada más comenzar su andadura. ¿Cómo es posible que un presidente de un país como Brasil acepte homologar la situación de terror generalizado instaurada en los últimos meses en la Bolivia de Morales?… aunque sea por puro egoísmo patrio ¿es que no le interesa defender los intereses económicos de las empresas cariocas establecidas en el país vecino?. El cinismo alcanza su zenit cuando Lula aprueba la gestión de Evo, pero al mismo tiempo activa todos los mecanismos previstos para la evacuación de sus conciudadanos, residentes en Bolivia.
Tampoco queda libre de crítica la propia Unión Europea, limitada a contemplar la situación desde la distancia y a enviar observadores de segunda fila que se han limitado a sugerir la estúpida obviedad de que es necesaria la distensión desde el dialogo franco y racional entre las partes enfrentadas.
Peor aún es la respuesta de algunos gobiernos, como es el caso del español, que siguiendo las líneas de su errática política exterior, ha multiplicado por dos la ayuda al régimen autoritario del Movimiento al Socialismo, sin dar respuesta alguna al daño causado a sus intereses inversionistas por los distintos procesos de nacionalización llevados a cabo en los dos últimos años.
El actual gobierno del Sr. Morales se ha instalado en la mentira y la demagogia desde el primer minuto en el que el Presidente comenzó a ejercer sus funciones, y lo más grave, ha generado un estado de cosas caracterizado por el enfrentamiento continuo y una violencia inusitada, muy difícil de erradicar actualmente.
Hasta tal punto llega el fenómeno descrito que su régimen podría pasar a los anales de la historia patria como el gobierno del terror, imitando así el periodo de la revolución francesa que tantas víctimas inocentes produjo. ¿Parece una exageración?… basta con recordar algunos de los hechos luctuosos habidos durante la gestión de Morales Sucesos del Cerro Posokoni en Huanuni- con el triste balance de dieciséis mineros fallecidos y sesenta y cinco heridos en enfrentamientos habidos entre cooperativistas y asalariados-, sucesos del “enero negro” en Cochabamba- donde en el intento de toma de la Prefectura , por parte de los “pacíficos movimientos sociales” con la sana y democrática intención de derrocar al gobernador electo, Manfred Reyes Villa, el joven e inocente Christian Urresti Ferrel es macheteado y ahorcado por las hordas campesinas-, sucesos de Sucre- en los que mueren tres personas y son heridas más de trescientas en choques habidos con miembros de la policía a las ordenes del Ministro Alfredo Rada –fue filmado en el lugar de los hechos organizando la feroz represión contra la ciudadanía. Sucesos de Pando, que terminan con treinta víctimas y más de cien desaparecidos…
¿Qué democracia moderna del mundo podría soportar una situación como la que sufren los bolivianos desde que les gobierna Morales? ¿Por qué los organismos internacionales independientes no investigan las constantes violaciones de los derechos humanos en el país? ¿Cuáles son los motivos que han llevaron en su momento a determinados estamentos, organismos , partidos ongs, etc a solicitar el Premio Nobel de la Paz para el Presidente de Bolivia?… Demasiadas cuestiones sin responder, pero el mundo sigue escondiendo la cabeza ….. hasta que el conflicto le estalle en las manos.
