(PD).- Pese a que más de la mitad de los ciudadanos asegura que tiene amigos de origen étnico o religión diferente a la suya, un 44% de la población preferiría vivir en una sociedad en la que la mayoría compartiera la misma cultura y creencias, mientras que el 43% opina lo contrario.
Son los datos del último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que reflejan además que más de la mitad, el 54%, cree el origen racial provoca un trato desfavorable.
El estudio sobre la discriminación en España señala también que el 52% considera que las desigualdades entre hombres y mujeres son grandes o muy grandes. Sin embargo, el 61,4% cree que estas diferencias se han reducido en los últimos cinco años.
El reconocimiento del esfuerzo que se ha realizado por reducir la discriminación entre sexos es mayor que el que los ciudadanos perciben sobre otros tipos de diferencias. Así, un 47,6% piensa que se ha hecho poco o ningún esfuerzo y un 40,1% sí considera que se ha trabajado mucho o bastante en ese sentido.
Un 53% cree que es muy frecuente o bastante frecuente la discriminación por el origen étnico, pero nueve de cada diez encuestados niega haber sufrido rato discriminatorio por este motivo o por la orientación sexual, la edad, la religión, el aspecto físico, el sexo o por tener pocos recursos económicos.
Casi seis de cada diez encuestados afirma que no conoce sus derechos en caso de sufrir discriminación.