Dicen que David Beckham está indignado. Sin embargo, no mucho puede hacer frente a un anuncio chino que utiliza sin escrúpulos entrevistas del jugador para doblar sus declaraciones y convertirlas en publicidad de un medicamento para la impotencia. Keanu Reeves y Sean Connery también han sido víctimas del montaje.
«¿Quieres saber cómo me mantengo fuerte sobre el terreno? La medicina americana Selikon me es de gran ayuda. Y también es mi talismán secreto con Victoria», señala el mediático centrocampista británico, según el doblaje al mandarín, al referirse a su fogosa relación con su mujer.
A continuación un animado Keanu Reeves, protagonista de películas como Matrix, dice sentirse «perfecto» después de que las píldoras hayan limpiado sus riñones: «Me ha sorprendido muy gratamente, y a mis novias también». Y la imagen de Sean Connery, de 78 años, resulta incluso entrañable: «Acabo de cumplir 70 años y, después de tomar esta medicina, Bárbara me ha dicho que parece que sigo siendo el James Bond de 25 años. Le he dicho a mis amigos de mi edad que tienen que usarla».
El vídeo, que ya puede verse también a través de Internet, ha provocado la ira de los Beckham, aunque el agente del futbolista ha declinado confirmar si presentarán alguna denuncia.
Aprobados por las autoridades
Y es que Beckham es un personaje venerado en China, un país donde es frecuente el consumo de medicamentos contra la impotencia y afrodisíacos para reforzar la libido, ya que por lo menos 80 millones de hombres padecen disfunción eréctil.
En declaraciones a la prensa china, un portavoz de la compañía que fabrica las píldoras, USA Selikon, que cuenta con una planta de producción en Pekín, señaló que las autoridades locales aprobaron el anuncio y añadió que éste ha recibido una calurosa acogida tras ser emitido en las cadenas televisivas chinas.
Según abogados del país asiático, el uso no autorizado de la imagen de celebridades extranjeras como Beckham en China puede deberse a la reciente prohibición para las estrellas locales de participar en publicidad sobre productos de salud que pueda ser malinterpretada por el público.
La debilidad de las penas para este tipo de delitos y la dificultad para que una estrella extranjera gane un pleito por uso indebido de su imagen en China son algunos de los motivos de que se produzcan estos abusos.