(PL).- La autopsia realizada al cadáver del inmigrante hallado muerto el pasado viernes, en el perímetro fronterizo entre la Ciudad Autónoma de Ceuta y Marruecos, confirmó hoy que el fallecimiento se debió «a los numerosos cortes que sufrió en su intento de saltar las dos vallas, y que, seguramente, le provocaron una importante pérdida de sangre».
Según fuentes cercanas a las investigación consultadas por Europa Press, además de las heridas, también hay que sumar que el inmigrante subsahariano –un hombre de entre 20 y 25 años– «logró saltar con facilidad la primera de las vallas y que consiguió llegar hasta la concertina de la segunda valla, donde quedó enganchado, desprendiéndose parte de la misma y golpeando al fallecido al menos dos veces contra el vallado, debido al efecto péndulo, cayendo finalmente al suelo».
El intento de salto se produjo en la madrugada del domingo al lunes, y la mala suerte se alió con el fallecido pues, además de la dificultad y riesgo que supone cruzar el perímetro fronterizo, en esa noche Ceuta sufría el azote de un temporal de viento de poniente, con rachas que superaron los 100 kilómetros hora.
El hallazgo del cadáver tuvo lugar a las 6,30 horas del viernes, por parte de una patrulla de la Guardia Civil que realizaba labores rutinarias de control.
