La secretaria de Justicia y Seguridad del PSC, Sandra Rodríguez, acusó ayer a la consejera de Bienestar Social del Gobierno de Canarias, Inés Rojas, de «ejecutar un apartheid con los menores extranjeros completamente calculado y con total frialdad».
Así lo indica Sandra Rodríguez en un comunicado en el que exige a la consejera y al alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, que «den la cara» y expliquen el cierre «a escondidas» del centro de menores extranjeros de Valle Jiménez, situado en el citado municipio tinerfeño.
Rodríguez asegura que la consejera, «en connivencia» con el alcalde de La Laguna, Fernando Clavijo, cerró el lunes el centro de menores extranjeros de Valle Jiménez «a escondidas, cortándoles la luz de repente».
«Días después y tras reubicar a los 40 niños en otros centros saturándolos y obligándolos a dormir en el suelo, clamó a los cuatro vientos ayuda porque la situación, que ella misma había creado, decía que era insostenible», argumenta.
Considera «inadmisible» que una consejera del Gobierno de Canarias permita que unos niños duerman en el suelo cuando tendría que hacer todo lo que esté en su mano para evitar esta situación que es «una absoluta inmoralidad».
«Resulta evidente que estos menores no son una prioridad para el Gobierno de Canarias, que tendría que utilizar el dinero que despilfarra para asegurarles un lugar digno donde dormir», asegura.
Para Sandra Rodríguez «resulta sorprendente» que se justifique el corte de la luz por el centro era provisional, ya que opina que no se ha hecho nada para buscar un ubicación alternativa digna.
Sin embargo, añade, el alcalde de La Laguna «mueve cielo y tierra corriendo como un poseso para la gestión de otros intereses, como por ejemplo el caso de la galería de Alcampo y su diligencia a la hora de retrasar la ejecución de la sentencia. Se desvive con los poderosos y machaca a los débiles».